La policía de Israel impidió el acceso de los fieles musulmanes a la mezquita de Al Aqsa, el tercer lugar más sagrado para el islam, indicó la organización que regula los enclaves islámicos y que vigila que se garantiza el statu quo en la Explanada de las Mezquitas. El Waqf Islámico confirmó el cierre de los accesos y el veto a musulmanes de todas las edades, horas después de que sólo permitieran la entrada de ancianos, según la agencia de noticias palestina Wafa. El área seguirá abierta para los judíos, que no tienen autorizado rezar y deben seguir una ruta prefijada, acompañados de policías. Al Aqsa es la mezquita más grande de Jerusalén, puede albergar a 5 mil personas dentro y en los alrededores. Se encuentra muy cerca de otros lugares de enorme relevancia religiosa para el judaísmo y el cristianismo como el Monte del Templo, considerado el lugar más sagrado para los judíos.