Viernes 2 de junio de 2023, p. 5
La novela Saltar una grieta explora cómo Julia investiga en paralelo a su madre Irene y a la figura misteriosa de la emperatriz Carlota. La protagonista va encontrando similitudes entre ellas basada en los hechos históricos y en su propia interpretación
, dijo la escritora Ingrid Rossi, autora del texto editado por el sello español Caligrama.
La narradora refirió en entrevista con La Jornada que le interesaban la relación madre e hija, el adulterio, la eutanasia y la enfermedad. Son temas que te ocupan en momentos particulares de tu vida
, así como la binacionalidad, dado que me importa mucho en el sentido de que yo soy mexicana y vivo en Bélgica desde hace 25 años
.
Los personajes y la historia se ubican en dos contextos: México y Bélgica. En ese tenor, Rossi añadió que aborda esos sentimientos de estar en los dos países, de no pertenecer a ninguno y a los dos. Me interesaba tocarlo porque es algo que está muy presente en mi vida
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Además, necesitaba concentrarme en la propia vida de Julia. Me parece interesante que se presentará un triángulo amoroso en su propia vida y que fuera analizando cómo resolverlo y no se limitará a la vida de su madre o a su investigación de Carlota
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Sobre la figura histórica, relató Ingrid Rossi que era una perfecta excusa para hablar de los dos países. Un personaje que fue muy importante en México, quizá menos en Bélgica. A pesar de que se ha escrito muchísimo al respecto, todavía tiene ángulos de los que se puede hablar. Traté de abordarlo desde facetas que no siempre se utilizan e ir entretejiendo su historia con la de la madre de Julia
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El título, continuó la autora, “une todo lo que hay en el libro, desde las fisuras literales de un terremoto ficticio hasta las grietas emocionales que están entre todos los personajes. Saltar una grieta se aplica a todos los que aparecen en la novela.
Me metí mucho en el personaje de Julia y en sus procesos mentales, siempre como una vuelta más que le puedes dar a las cosas. La pones en situación de que se estaba preguntando: ¿y ahora qué? Cuando se entrevista con Julio, se plantea: ¿qué hago aquí? Y ves qué justificaciones se da ella en su mente y cómo se va conociendo a sí misma.
La relación más difícil en la novela, presentada el pasado 23 de mayo, que obsesiona a Julia es con su madre, pero “cree que no hay ninguna herida en relación con su padre hasta que poco a poco ve en la historia que éste también juega un papel.
Eso era un poco lo que quería abordar, que no fueran unos personajes culpables y otros totalmente inocentes. Que el padre y la madre fueran mucho más matizados y que ninguno de los dos fuera totalmente culpable.
–¿Cómo define a Carlota?
–Los dos (con Maximiliano) eran muy ingenuos en su momento, decididos a vivir esta aventura, muy ciegos de ver las circunstancias tal cual eran. En relación con su locura, entre más leo más me parece que fue un personaje que estuvo muy acorralado al final y que a nadie le convenía que estuviera ahí ni que hablara.
“Es cuestionable su locura. Todo el mundo la da por loca, pero las pruebas son poco claras. Es un personaje trágico al final. Es curioso leer sus cartas, observarla, pero también es raro, como lo digo en el libro, que ella no se haya rebelado, que no haya dado una pelea más fuerte y se haya dejado encerrar, quizá porque todo estaba perdido: Maximiliano estaba muerto y ya no tenía por qué luchar.
Todo eso es algo que no se sabe. Por eso sigue siendo un personaje misterioso, porque se desconocen cuáles fueron sus motivaciones o si se dejó llevar por sus circunstancias. Era una mujer poderosa, rica, lo que demuestra que también en esa época ellas no podían hacer mucho.