La obra Incendios, parte de la tetralogía La sangre de las promesas, del dramaturgo Wajdi Mouawad, es puesta en escena por la compañía Parvada Teatro en breve temporada en el Foro Lucerna. Se trata de una compleja y conmovedora historia, que, como las demás obras de la saga, reflexiona sobre la construcción de la identidad a partir de profundizar en la memoria individual y social.

El texto de Mouawad narra los problemas del exilio y el desplazamiento a causa de la guerra civil en el Líbano a través de la historia de los gemelos Jeanne y Simon.

Su madre es una inmigrante llamada Nawal Marwan, quien, después de vivir sus últimos cinco años en un impenetrable silencio, muere y deja un último deseo a sus progenitores.

El notario Hermile Lebel, su albacea de confianza, les revela que la herencia de su difunta madre son dos sobres cerrados que deberán entregar a su desconocido padre, a quien creían muerto, y a un hermano que no sabían que tenían.

Los mellizos inician así una travesía hacia el lejano país materno, que ha sido carcomido por la violencia. En su búsqueda se entreteje la barbarie de la guerra y la desgarradora tragedia que envuelve sus orígenes.

En charla con La Jornada, José Sampedro, director de la puesta en escena, refiere que se trata de una historia que gira en torno al amor incondicional, que, para llegar a él, primero hay que pensar para dejar de odiar.

La obra refleja que para terminar con las guerras hay que aprender a salir de la ignorancia, ya que todos los conflictos bélicos vienen de la falta de entendimiento, agrega Sampedro.

A escala familiar se trata de romper patrones de violencia entre los hermanos, para lo cual hay que aprender a pensar, para dejar de odiar, reiteró el creador escénico.

Incendios conserva su vigencia, ya que cuestiona la naturaleza y la condición humanas. A pesar de lo más devastador que le puede pasar a una madre, ésta conserva su promesa y amor incondicional. De ahí que sea una obra muy conmovedora, porque toca lo más oscuro y lo más luminoso de la vida.

La obra integra la tetralogía La sangre de las promesas junto con las obras Litoral, Bosques y Cielos, cuyos personajes necesitan hurgar en su pasado para sanarlo, entender desde el presente de dónde vienen y reconciliarse con ese pasado, con el fin de tener un mejor futuro.

Con traducción de Humberto Pérez Mortera, música original –ejecutada en vivo– de Eduardo Garcilazo, iluminación de Iván Sotelo, vestuario de Érick George y las actuaciones de Sharon Ayón, Rodolfo Zarco, Ana Guzmán Quintero, Lucía Madariaga, Carla Heftye, Enrique Arce Gómez, César Antulio y Saúl Villa, así como la producción de Magali Ríos, Incendios, con la compañía Parvada Teatro, se presenta en corta temporada a partir de hoy y hasta el 16 de mayo en el Foro Lucerna (Lucerna 64, colonia Juárez), los martes a las 20 horas.