yer seguramente se presentó en el Polyforum Cultural Siqueiros un nuevo
grupo, ¿Colectivo por México?, a proclamar frente a los mexicanos nada menos que su tabla de salvación. Se llama Un punto de partida
, redes sociales dixit. Se trata del consabido grupo de políticos, académicos e intelectuales
que está seguro de estar más allá del bien y del mal (los partidos políticos), y por encima del mundanal ruido (la polarización provocada por la 4T
) y, de veras, no busca promover a ningún candidato. Sencillamente entregarán la tabla de salvación de México a cualquiera que sea el candidato de la oposición a Morena para 2024, sea cual sea su filiación política o ideológica.
Los partidos y el que sea su nominado ya tienen la base de lo que será su propuesta política para enfrentar y resolver los desafíos del país. Como se hace en estas proclamas, se aglomeran todos los problemas, se ignora o se falsea cómo se originaron, y se dice que la tabla los resolverá. Se trata de retomar
el camino donde tan bien íbamos con desarrollo, justicia, seguridad, igualdad.
El objeto encantado que será exhibido en el mercado electoral se llama hazaña
: México debe ser una hazaña
o la Hazaña por México
. La palabra hazaña
tiene que ser comprada por su clientela electoral y ser asociada a la tabla y al candidato. El salvador de México consumará una hazaña
, echando del gobierno todo lo que huela a lopezobradorismo. La sociedad civil
y todos los sectores sociales, económicos y políticos
serán parte de la hazaña
.
La tabla ofrece autonomía e independencia
al Poder Judicial: cualquier asomo de oportunismo es puramente casual. Pero señala al Legislativo de abyecto
, este que ahora opera sin moches. Como la de Moisés, tiene la tabla 10 mandamientos. Es el deber ser neoliberal de la oposición para crear un modelo de país
de prosperidad, haciendo a un lado la vergüenza y la indignidad de este territorio donde medran los que viven a la espera de la dádiva asistencial o de las remesas
. Adiós a los derechos sociales efectivos, adiós a los programas sociales, las pensiones, los apoyos, las becas. México es una proeza mayor que los pueblos originarios, históricamente discriminados y despojados de sus tierras, culturas, lenguas y recursos
, dice la tabla, como si México no supiera que los dueños de la tabla lo fueron de todos los privilegios y del poder que hizo de los pueblos originarios eso que alegan.
La tabla prevé quitarle facultades a la Secretaría de Hacienda para evitar el manejo discrecional del presupuesto
, y asignarlo a quien deba tener la facultad discrecional de robar los recursos públicos para repartirlos entre su banda, como se hizo en los regímenes del PRI, que luego incluyó a sus socios del PAN y del PRD.
Por supuesto, la tabla algo dice sobre la pobreza y la desigualdad. Los autores de la misma escriben sin rubor. Cómo no. Ya sabemos que para los políticos neoliberales la política consiste en inventar un relato que suene verosímil
: mientras te meto mano y te despojo de la cartera, grito ¡me estás robando! Por eso la tabla es capaz de proponer recuperar la eficacia en los programas de vacunación y garantizar vacunas a toda la población
, como si una de las hazañas
de los neoliberales no fuera haber aplastado el derecho a la salud y las instituciones que la atendían. Por lo visto, los autores de la tabla, qué buena noticia, no se dan cuenta: las mayorías de los jodidos viven una revolución de las conciencias.
Y no podía faltar: la polarización debe cesar
. AMLO es el culpable. ¿Hay polarización? Sí, la hay. Es una buena noticia, aunque una gran dificultad cotidiana. La polarización existe en el espacio acotado de las élites políticas y los partidos; en el espacio de la política poblado por las grandes mayorías esa denuncia
es fruslería. En ese espacio no están los privilegiados de la historia: ahí no hay polarización. Conflictos, sí; son característicos de una sociedad donde la estrechez de la vida de los nadie es producto de la existencia del polo privilegiado: este es el polo que polariza.
Ese polo vive en la abundancia, pero no le basta. Ni siquiera se da cuenta. Para los privilegiados sus privilegios son pocos siempre. Por eso el llamado de la tabla: ¡élites neoliberales del mundo uníos! Les es de vida o muerte recobrar los privilegios: ya son cuatro años de agobio en el desierto, no pueden estar sino como están: crispados y encabronados.
Un grupo particular de ese polo, muy poderoso, son los jueces mexicanos. Los de todos los niveles. Y están actuantes. No son una amenaza: son una fuerza en marcha con el lawfare enteramente desatado. Sin más vueltas la traducción es guerra jurídica, jugadas a la mala con apariencia de legalidad, en defensa del régimen neoliberal. En Argentina, Brasil, Chile o México. Esta es la fuerza mayor contra la continuidad del proyecto de la 4T. La reforma total ahí es urgente.
La tabla puede convertirse en anécdota. Hay que ver sus 50 páginas: pero, seguro, ninguna novedad.