Sábado 14 de enero de 2023, p. 17
Washington. Autoridades estadunidenses anunciaron ayer el endurecimiento de las normas sobre estabilizadores
y otros accesorios utilizados para convertir pistolas y revólveres en armas largas, consideradas especialmente peligrosas.
El viernes, el grupo de presión Gun Owners of America anunció que planeaba emprender acciones legales para bloquear la medida.
Las pistolas modificadas estarán ahora sujetas a la misma normativa que las escopetas de cañón corto
que, desde 1934, requieren pago de impuestos y acatar controles más estrictos que otras armas de fuego, detalló el fiscal general Merrick Garland en conferencia de prensa.
En aquel momento, los legisladores comprendieron que estos instrumentos tenían una combinación mortal: son más fáciles de ocultar que los rifles y más potentes que las pistolas
, afirmó.
No obstante, los fabricantes llevan tiempo intentando eludir las leyes federales vendiendo estabilizadores que permiten convertir las pistolas en rifles de cañón corto
, para evadir al mismo tiempo las restricciones, comentó el presidente Joe Biden en un comunicado.
Según el Departamento de Justicia, desde 2015 se han vendido al menos 3 millones de estabilizadores. Sus propietarios disponen ahora de 120 días para reportar la posesión ante las autoridades sin pagar impuestos.
También pueden quitarlos de esas piezas en las que estaban instalados o alargar el cañón de esas pistolas para convertirlas en otro tipo de arma.
Estas regulaciones se propusieron por primera vez en 2020, bajo la administración de Donald Trump, pero se retiraron rápidamente después de que el círculo de cabildeo de las armas de fuego y varios funcionarios republicanos protestaran. Garland las reintrodujo en 2021.