darle dientesal Código Penal y al Código Civil capitalinos, señalaron activistas de la colectiva Cam Cai, quienes consideraron que la violencia vicaria es la más dolorosa y vil que una mujer pueda sufrir.Foto La Jornada
Miércoles 30 de noviembre de 2022, p. 34
A 12 años de sufrir en carne propia violencia vicaria, Mildred Sáenz celebró que este martes el Congreso de la Ciudad de México aprobara el reconocimiento de este tipo de violencia en la ley local.
En ese entonces la ex pareja de Mildred comenzó a envenenar
a la pequeña, pero la violencia no paró ahí: el hombre, a bordo de un coche, arrastró a la mujer unos 30 metros. Hasta ese momento Sáenz no sabía que ambos hechos eran casos de violencia vicaria e incluso intento de feminicidio.
Luego de advertir que solicitaría la guarda y custodia de su hija, señaló: “Mi hija fue envenenada, hoy tiene 21 años y tristemente yo ya no la puedo recuperar, (…). Mi ex pareja y su señora madre manipularon a mi hija y ahora ella no me quiere ver, no quiere saber nada de mí, (…), dice que no tiene madre, que tal vez fue un vientre de alquiler el que la tuvo”, dijo Mildred, quien es activista de Cam Cai, colectiva que apoya a las mujeres contra la violencia vicaria.
Con 43 votos a favor, el Congreso capitalino reformó la Ley de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia para incluir el concepto de violencia vicaria, que se comete por personas que tengan una relación de matrimonio o sentimental y que provoquen la separación de la madre de sus hijos o cualquier persona vinculada significativamente con ella por medio de la retención, maltrato, amenaza o puesta en peligro, con la finalidad de controlarla..
“Empezamos a luchar, a hacer visibles los casos, luego surgieron nuevos movimientos, que celebramos porque nos hicieron agarrar más fuerza a todas. Esto se empezó a gestar en Morelos, luego en Puebla; lamentablemente, la primera iniciativa de ley que se presentó fue en Tabasco y hasta el día de hoy está congelada.
“Hoy celebramos que este Congreso haya aprobado la reforma, es el onceavo que reconoce la violencia vicaria. Nuestro siguiente paso es darle dientes al Código Penal y al Código Civil” capitalinos, explicó Sáenz, quien definió este tipo de violencia como la más dolorosa y vil que una mujer pueda sufrir.
Para el caso de Mildred la aprobación de la ley es tardía; sin embargo, llamó a las víctimas de este tipo de violencia a no callarse para que puedan acceder a la justicia, a sus hijos, y no sufran más maltratos.
Yo ya no podría (interponer una denuncia penal). Yo sólo puedo enfrentar mi caso por medio de duelo; esperaría que algún día mi hija pudiera tener esta apertura para saber qué fue lo que realmente pasó. No se callen, sigamos luchando juntas
, reafirmó Mildred entre lágrimas, pero con la cabeza y el puño en alto.