Miércoles 23 de noviembre de 2022, p. 41
Las artes marciales como mecanismo de defensa personal de mujeres va en aumento, aseguró Darinka Lejarazu, coordinadora de Comando Colibrí CDMX, iniciativa dirigida y gestionada por mujeres en zonas de vulnerabilidad en la capital del país y algunos municipios de la zona conurbada y otras entidades de la República.
En la actualidad cuenta con dos escuelas, una ubicada en la colonia Obrera, alcaldía Cuauhtémoc, y otra en San Cristóbal de las Casas, Chiapas.
En la Ciudad de México, la base de la enseñanza es el box tailandés, pero se hace un entrenamiento integral y se concentra en la lucha o pelea de pie, indicó.
Comando Colibrí es una de las 150 organizaciones feministas que apoya Fondo Semillas, de las cuales 37 se ubican en 13 alcaldías de la Ciudad de México.
Fondo Semillas es una organización feminista que desde hace 32 años busca recursos para grupos y colectivos de mujeres que trabajan por construir realidades más justas y libres, indicó, a su vez, Tania Turner, directora ejecutiva de dicho fondo.
Poco más de 13 mil mujeres de diferentes alcaldías de la capital, afectadas por algún tipo de violencia, se han separado de sus parejas y requieren de alternativas económicas para sacar adelante a sus familias, están en proceso de recuperación o han estado en la cárcel, han tomado la iniciativa de rescatarse a sí mismas por medio de capacitación, atención sicológica o rehabilitación, añadió.
Destacó el trabajo que realizan con mujeres que están privadas de su libertad y a las que apoyan en su reinserción social al obtener su libertad. Los recursos que reciben del Fondo Semillas permite apoyar a las mujeres que al salir del penal se encuentran solas.
Explicó que son recibidas en una casa de refugio donde tienen capacitación laboral y apoyo sicológico.
En tanto, un colectivo de mujeres campesinas indígenas que han migrado a la ciudad y han salido de sus entornos por temas de violencia, cuentan con una casa comunitaria en Milpa Alta.