Domingo 13 de noviembre de 2022, p. 21
Madrid. El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, alertó ayer que millones de personas luchan contra el hambre y la hambruna en un mundo cada vez más conflictivo y desigual a medida que la población mundial se acerca a los 8 mil millones de personas, hito que se superará oficialmente la próxima semana.
A menos que reduzcamos el enorme abismo entre las personas que tienen y las que no tienen, nos estaremos enfrentando a un mundo de 8 mil millones de personas lleno de tensiones y desconfianza, crisis y conflicto
, aseveró Guterres en un texto publicado ayer por la agencia Europa Press.
A pesar de los avances en materia sanitaria y alimentaria, las divisiones son cada vez más grandes a escala mundial, lo que ha llevado a cifras récord de desplazados en busca de oportunidades
a causa de guerras, conflictos y desastres climáticos.
Lamentó que un puñado de personas multimillonarias controla tanta riqueza como la mitad más pobre del mundo
, y señaló que uno por ciento de la población más rica a nivel mundial recibe una quinta parte de los ingresos del mundo
.
Mientras tanto, la población de países más ricos tienen una esperanza de vida hasta 30 años mayor que las de los países más pobres
.
A medida que el mundo se ha vuelto más rico y saludable en las últimas décadas, las desigualdades también han aumentado
, advirtió.
El jefe de la ONU afirmó que la aceleración de la crisis climática y la recuperación desigual de la pandemia de covid-19 están potenciando las desigualdades. Nos dirigimos directamente a la catástrofe climática, mientras las emisiones y las temperaturas siguen aumentando. Las inundaciones, las tormentas y las sequías están devastando países que no han contribuido casi nada al calentamiento global
, puntualizó.
La guerra en Ucrania se suma a las actuales crisis alimentaria, energética y financiera, golpeando con mayor dureza a las economías en desarrollo. Estas desigualdades afectan más a las mujeres y las niñas, y a los grupos marginados que ya sufren discriminación
, sostuvo.
Además, subrayó que los países del hemisferio sur se enfrentan a enormes deudas
y al aumento de la pobreza y el hambre
, así como a los crecientes impactos de la crisis climática, por lo que tienen pocas posibilidades de invertir en la recuperación de la pandemia, la transición a las energías renovables o la educación enfocada a la era digital
.
La ira y el resentimiento contra los países desarrollados están llegando a puntos de ruptura
, afirmó antes de indicar que las divisiones tóxicas y la falta de confianza están provocando retrasos y bloqueos en una serie de temas, desde el desarme nuclear hasta el terrorismo y la sanidad
. Guterres insistió en que el primer paso es reconocer la desigualdad galopante
, la cual es una elección
, y recordó que los países desarrollados tienen la responsabilidad de revertirla
.