Domingo 4 de septiembre de 2022, p. 18
Weed. Miles de personas seguían ayer bajo órdenes de evacuación luego de que un incendio forestal avivado por el viento arrasó una zona rural del norte de California, causó daños en al menos un centenar de viviendas y provocó lesiones a un número indeterminado de personas.
El llamado incendio Mill comenzó anteayer al norte de esta ciudad de 2 mil 600 residentes a 400 kilómetros al norte de San Francisco. Las condiciones climáticas mejoraron durante antenoche y los bomberos pudieron contener el fuego en 20 por ciento, pero otro incendio, el Mountain, que estalló horas después al noroeste de la localidad, creció sustancialmente. No se reportaron heridos ni inmuebles perdidos en ese incendio.
Phil Anzo, jefe de la unidad para el condado de Siskiyou del Departamento Forestal y Protección contra Incendios de California, estimó que alrededor de 100 casas y otras construcciones se perdieron con Mill. El gobernador Gavin Newsom declaró estado de emergencia para Siskiyou y dijo que se recibió una subvención federal para ayudar a garantizar la disponibilidad de recursos vitales para apagar el incendio
.
California registra una sequía profunda a medida que se acerca lo que tradicionalmente es la peor temporada de incendios. Los científicos dicen que el cambio climático ha hecho que durante las últimas tres décadas el oeste de Estados Unidos sea más cálido y seco. Advierten que seguirá haciendo que el clima se vuelva más extremo y que los incendios forestales sean más frecuentes y destructivos.
En los últimos cinco años, California ha experimentado los incendios más grandes y dañinos de la historia del estado; Weed ha visto tres grandes desde 2014.
Tras estallar Mill se registraron cortes de electricidad que afectaron a unas 9 mil personas y varios miles más seguían anoche sin luz.
Es el tercer gran incendio registrado en otros tantos días en California, que sufre una prolongada sequía y una ola de calor que se espera que acerque los termómetros a los 38 grados.
Lluvias azotan el norte de Pakistán
En tanto, las lluvias torrenciales han azotado zonas del norte de Pakistán que hasta ahora habían salido indemnes de las lluvias monzónicas que afectan principalmente a la provincia de Sindh, en el sur del país, explicó el ministro de Planificación, Ahsan Iqbal.
Todavía no están mejorando las cosas. Seguimos en la fase de rescate y ayuda
, indicó ayer el funcionario a la agencia noticiosa Bloomberg.
El temporal ha afectado a 33 millones de personas y dañado más de un millón de viviendas. La recuperación en las zonas afectadas apunta a que será lenta debido a los problemas para desalojar el agua, según Iqbal. Es un problema muy importante porque están en llanuras
, advirtió.
La Organización Mundial de la Salud alertó sobre el grave riesgo que suponen las enfermedades infecciosas relacionadas con el agua como el cólera y las fiebres tifoideas.
Al menos 23 personas murieron por la caída de rayos en el este de India, anunciaron ayer las autoridades. Los fallecimientos, en el estado de Bihar, se produjeron entre el miércoles y el viernes, durante unas tormentas ocurridas en plena temporada de los monzones. Las víctimas fueron en su mayoría granjeros y campesinos.
El jefe del gobierno de Bihar, Nitish Kumar, expresó sus condolencias y prometió compensaciones a las familias de los fallecidos.
Los rayos son comunes en India durante el monzón, de junio a septiembre. En 2019, cerca de 2 mil 900 personas murieron en India víctimas de los rayos, según cifras oficiales.