La escritora y la jefa de Gobierno de la CDMX se reunieron en un conversatorio organizado por la fundación que preserva y difunde el legado de la autora de Tinísima
Sábado 28 de mayo de 2022, p. 2
La escritora Elena Poniatowska y Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México, charlaron este jueves sobre sus biografías y diversos temas relacionados con la literatura y la condición femenina en el conversatorio Los libros y la vida.
El encuentro se efectuó en las instalaciones de la Fundación Elena Poniatowska Amor, y tuvo de anfitriona a la escritora Carmen Boullosa, quien explicó que el diálogo forma parte de los festejos por el cumpleaños 90 de la autora de La noche de Tlatelolco, que se celebró el 19 de mayo.
Tenemos a la autora mayor de México, que ha escrito y ha señalado los dolores del país, y que encarna el grito de la revuelta; tenemos también a la figura más alta del gobierno de esta ciudad
, expresó Boullosa al presentar a las invitadas.
La sesión comenzó con preguntas acerca de las lecturas en la infancia. Poniatowska recordó que el primer libro que leyó cuando estudiaba en el Liceo Franco Mexicano fue Platero y yo, de Juan Ramón Jiménez. En México habían muchos burros y los contábamos mientras íbamos a cualquier paseo; amé a los burros como no había amado nunca a ningún novio
.
La jefa de Gobierno de esta capital, quien es doctora en ingeniería ambiental por la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), recordó como sus primeras lecturas a Alicia en el país de las maravillas, de Lewis Carroll, y la novela de la escritora estadunidense Louise May Alcott, Mujercitas, texto que refleja el crecimiento de niñas y adolescentes
.
En el conversatorio también se abordó el tema de la narración oral y cómo en el núcleo familiar se cuentan historias. Sheinbaum Pardo mencionó que su abuela materna, nacida en Bulgaria, hablaba siete idiomas y le contaba cuentos de 12 princesitas, mientras Elena recordó a Magdalena Castillo, quien era de Tomatlán, Puebla: Todo lo que contaba me emocionaba
, compartió la periodista.
En esa dinámica de pregunta y respuesta se desarrolló el diálogo mediante el cual el público conoció un poco la historia de cómo Sheinbaum estudió en el Colegio de Ciencias y Humanidades Sur y después su paso por las facultades de Ciencias e Ingeniería de la UNAM.
La felicidad
Boullosa llevó la charla al tema de la felicidad, y les preguntó cuál había sido el momento más feliz de su vida. La primera en contestar fue la autora de Hasta no verte Jesús mio: “escribí un cuento que se llama ‘La felicidad’, pero en realidad es un relato triste. Bueno, convencionalmente uno dice el momento en que me enamoré, en el que nacieron mis tres hijos; yo hubiera teniendo unos 18, pero Guillermo dijo que no tantos; así que la felicidad ahorita pueden ser ustedes que sonríen y tienen cara de buena gente, y no nos van a maltratar”.
Sheinbaum agregó que el momento más feliz de su vida fue cuando su hija Mariana cumplió un año. Lo recuerdo como un momento de gran felicidad en casa de mi madre. Fue memorable
.
A la hija del químico Carlos Sheinbaum y la bióloga Annie Pardo también se le pidió que contara qué la motivó a escribir la tesis Estudio termodinámico de una estufa doméstica de leña para uso rural.
Cuando ves a las mujeres en comunidades rurales que alimentan a sus hijos, hacen la comida muy temprano y van por leña en una comunidad donde había que ir también por el agua y que tú vives una situación de mayores privilegios, en ese momento piensas en la desigualdad de las mujeres, pero particularmente la que padecen las que viven en zonas rurales, que es todavía mayor; está la posibilidad de disminuir esa cantidad de trabajo físico. Esa es parte de una reflexión que hice en aquel momento.
Al referirse al tema del feminismo, Poniatowska se consideró mala feminista; expresó que en cierto sentido se trata de tomar la palabra, decir lo que se piensa, y a veces da un miedo terrible
.
Sobre la situación de inequidad que viven las mujeres, Sheinbaum comentó que ella se dio cuenta de eso en el momento que tenía que usar el transporte público, pues “a los 12 años, al subirte al transporte, pensé: ‘Vivo una situación distinta a la de mi hermano’”.
La Fundación Elena Poniatowska Amor surgió en 2011 con la finalidad de organizar, difundir y preservar el archivo histórico de la escritora y su familia.