▲ Han pasado ocho años desde que Carmen fue atacada con ácido por su ex pareja y cada día es lo mismo: observar los estragos físicos frente al espejo le trae de inmediato el recuerdo de su agresor, porque fue algo planeado, no un accidente, señala. Su expediente estuvo perdido cuatro años y ahora, mientras la justicia llega, se empeña en consolidar la fundación que lleva su nombre, la cual otorga asesoría legal y sicológica a mujeres afectadas por esta violencia machista, que aunque es una de las más brutales, sólo Oaxaca la tipifica como delito, mientras en la capital del país y el estado de México se considera una agravante; el resto de las entidades la clasifica como lesión que tarda menos de 15 días en sanar. De 32 víctimas registradas desde 2001, seis murieron. Foto Jair Cabrera / A. Urrutia, T. Molina y J. Cabrera