Bruselas. La principal negociadora de Estados Unidos para la crisis en la frontera entre Ucrania y Rusia, Wendy Sherman, presentó ayer a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) detalles de las conversaciones que sostuvo en Ginebra con su par de Rusia, Sergei Riabkov, mientras el gobierno de Ucrania elogió la unidad occidental.

Sherman viajó a Bruselas, donde se reunió con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, y embajadores ante la alianza con la finalidad de dar los detalles de la tensa negociación de siete horas que trató de desactivar la crisis entre Ucrania y Rusia.

Estados Unidos y la alianza atlántica denuncian el despliegue de 100 mil militares rusos con blindados y artillería pesada en la frontera con Ucrania para un presunto ataque, lo que Moscú niega, además pide detener la influencia de Occidente en la región y la existencia de una representación ucrania en la alianza.

Por lo pronto, 3 mil soldados rusos iniciaron ejercicios con fuego real en zonas cercanas a Ucrania.

En un tuit, Sherman aseguró que Estados Unidos se compromete a trabajar junto a sus aliados y socios para instar a la desescalada y responder a la crisis de seguridad causada por Rusia. En otro, aseguró que los aliados no tomarán decisiones sin la opinión de Ucrania.

Jen Psaki, vocera de la Casa Blanca, advirtió que es muy pronto para saber si los rusos están dispuestos a negociar en serio. Rusia puede usar estas negociaciones para argumentar que la diplomacia no funciona y continuar con sus acciones agresivas, comentó en conferencia de prensa.

Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, calificó de positivas las primeras conversaciones mantenidas con Estados Unidos, aunque advirtió que todavía no hay muchas razones para ser optimistas, habría que ser ingenuo para creer que una primera ronda da grandes resultados.

El canciller ucranio, Dmytro Kuleba, manifestó que nuestra fuerza reposa en la unidad.

El presidente de Ucrania, Volo-dymyr Zelensky, pidió una cumbre con Rusia, Francia y Alemania para poner fin al conflicto con los separatistas prorrusos en el este de ese país, en medio de las tensiones internacionales con Moscú.