Miércoles 29 de diciembre de 2021, p. 5
México comenzó 2021 en semáforo rojo
, es decir, en máximo riesgo sanitario, debido a la pandemia por Covid-19, declarada en marzo de 2020. Esto significó que tanto museos como galerías de arte, en general, estuvieron cerrados después de una efímera reapertura el otoño anterior.
Los recintos, sin embargo, no pararon actividades a raíz de la crisis sanitaria, las trasladaron a la virtualidad en la forma de exposiciones, la impartición de conferencias y cursos. Asimismo, los artistas aprovecharon el espacio digital para difundir su obra y subsistir con talleres.
Con la llegada de la primavera, y el mejoramiento de la situación epidemiológica, se inició un paulatino regreso a la nueva normalidad, con sus contratiempos, que se prolongaron durante el año.
La falta de recursos o apoyos gubernamentales y problemas internos en las estructuras administrativas o laborales, ha puesto en peligro a más de un museo en el país. Están los casos, por ejemplo, del Museo de Arte Contemporáneo Ateneo de Yucatán (Macay), en Mérida; el de José Luis Cuevas y el Dolores Olmedo Patiño, en la Ciudad de México, y el de Arte Contemporáneo de Oaxaca.
Crisis económica
El pasado 28 de julio, el director del Macay clausuró el recinto privado en forma simbólica debido a la escasez de fondos económicos. El cierre les permitió estudiar una estrategia a seguir en conjunto con la sociedad civil. En la actualidad abre lunes y sábado.
A lo largo del año, el Museo José Luis Cuevas organizó dos subastas y una noche de gala con la finalidad de recabar fondos para pagar a su personal y subsanar el mantenimiento del edificio del siglo XVII que lo alberga desde hace 29 años.
El Museo Dolores Olmedo Patiño cerró sus puertas en Xochimilco y en julio anunció una nueva sede en el Aztlán Parque Urbano, proyectado para la segunda sección del Bosque de Chapultepec, con apertura en 2023. El Museo de Arte Contemporáneo de Oaxaca se encuentra sin actividad a causa de un conflicto laboral.
Por otro lado, está lista para su apertura la Casa Estudio Leonora Carrington, ubicada en la antigua residencia de la pintora surrealista en la colonia Roma, ahora dependiente de la Universidad Autónoma de México.
A partir del primero de julio, la Galería Juan Martín, con seis décadas de existencia, ya no existe más en su forma física y sólo es virtual. Debido a la escasez de ventas a raíz de la pandemia, Malú Block, de 88 años, directora de la galería junto con Graciela Toledo, decidió buscar una nueva sede y mientras se le puede visitar en su página de Internet.
El fallecimiento, el 17 de marzo, del pintor, escultor y grabador Vicente Rojo, dos días después de cumplir 89 años, conmocionó al sector cultural. Asociado con la Generación de la Ruptura, Rojo realizó su último proyecto escultórico para el Antiguo Colegio de San Ildefonso. Consistió en diseñar el concepto artístico del espacio donde descansarán las cenizas del poeta Octavio Paz y su compañera Marie-José Tramini.
Una gran retrospectiva
de la obra del artista se prepara para probablemente principios de 2022, en la que se pretende abarcar desde su primer cuadro hasta el último
, anunció su hijo Vicente Rojo Cama. Señaló que la exposición está planeada, en principio, para el Museo de Arte Moderno, donde se exhibiría pintura y escultura de pequeño formato, mientras en el Museo Nacional de la Estampa se mostraría gráfica y dibujo.
Más de 45 mil personas recorrieron las cinco salas del Museo del Palacio de Bellas Artes que albergaron las 164 piezas de 40 artistas incluidas en El París de Modigliani y sus contemporáneos. La exposición, anunciada originalmente para marzo de 2020, se aplazó debido a la pandemia y abrió al público en dos periodos: del 7 de septiembre al 13 de diciembre de 2020 y del 17 de marzo hasta el 18 de abril de 2021.
Toledo ve, la última gran exposición curada personalmente por Francisco Toledo (1940-2019) e inaugurada por el artista juchiteco en el Museo Nacional de Culturas Populares, viajó a la Casa de México en España, en Madrid, donde se abrió al público el 29 de abril.
La muestra de más de 600 piezas presentaba por vez primera al pintor y grabador en su faceta de diseñador, un aspecto de su producción poco conocido.
La pintora Frida Kahlo (1907-1954) siempre es noticia. En noviembre, el coleccionista argentino Eduardo Costantini desembolsó 34 millones 883 dólares para comprar el óleo Diego y yo (1949) de la coyoacanense en una subasta de la casa Sotheby’s. Actualmente, su nombre, convertido en marca, se encuentra envuelto en un litigio legal entre una empresa panameña y los descendientes de la artista.