La Habana. El canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, desmintió a su homólogo estadunidense, Antony Blinken, quien acusó a la isla de reprimir la libertad de expresión y otros derechos humanos.

El secretario de Estado de Estados Unidos apremió ayer en Naciones Unidas a las autoridades de la isla caribeña a respetar las libertades fundamentales del pueblo cubano y su derecho a manifestar sus aspiraciones. En Twitter, Bruno Rodríguez destacó que las acusaciones de Blinken no tienen que ver con la realidad de Cuba.

Instamos al gobierno cubano, miembro del Consejo de Naciones Unidas para los derechos humanos, a respetar los derechos humanos y las libertades fundamentales del pueblo cubano, señaló Blinken, en referencia a las manifestaciones del 11 de julio en la isla, alentadas desde Estados Unidos.

Blinken llamó a la comunidad internacional a alzar la voz contra los arrestos masivos de cubanos que protestaron y que, según autoridades de La Habana, fueron en su mayoría juzgados por delitos menores y liberados.

Rodríguez respondió en un tuit: “Estados Unidos, incapaz de justificar la política inhumana vs. nuestra población acude, como (Donald) Trump y (Mike) Pompeo, a la mentira para desviar atención de graves violaciones de derechos humanos que cometen a diario en su propio territorio y en el mundo”.

Citó como ejemplo el abuso contra migrantes haitianos en la frontera sur de Estados Unidos por guardias montados, lo que consideró una expresión repugnante del desprecio racista hacia las personas de América Latina y el Caribe.