En México, entre 145 mil y 250 mil niños y adolescentes están en riesgo de ser utilizados por grupos delictivos en el país, principalmente en labores de halconeo, homicidios y secuestros, alertaron la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim) y el Observatorio Nacional Ciudadano de Seguridad, Justicia y Legalidad (ONC).

Más de la mitad de los menores en riesgo se concentran en Jalisco, estado de México, Chiapas, Puebla, Veracruz y Michoacán.

Al presentar el estudio Reclutamiento y utilización de niñas, niños y adolescentes por grupos delictivos en México –elaborado con apoyo de la embajada de Alemania en México–, las organizaciones explicaron que la pobreza, la marginación, el abandono, la falta de oportunidades, la violencia familiar y la cercanía a zonas con presencia de grupos delictivos son factores aprovechados por el crimen organizado para facilitar su captación.

Tania Ramírez, directora ejecutiva de la Redim, señaló que los menores desempeñan inicialmente labores de informantes o halcones y conforme pasa el tiempo adquieren mayores responsabilidades en tareas más riesgosas como el traslado de mercancías ilegales y la vigilancia de casas de seguridad, e incluso se les asigna la ejecución de secuestros u homicidios.

Francisco Rivas, director general del ONC, apuntó que el contexto social es un detonante para el reclutamiento, y añadió que si bien los cárteles no son los únicos involucrados, sí son los más visibles; también están presentes las pandillas y familias dedicadas a actividades delictivas.

Ramírez agregó que, desde un enfoque de género, las mujeres son más vulnerables al reclutamiento. Son tratadas como esclavas sexuales, parejas de los miembros del grupo delictivo y obligadas a tener relaciones sexuales, a abortar o a embarazarse.

Sostuvo que en México el reclutamiento no está tipificado penalmente y sólo se le considera una forma de trata de personas, por lo que el marco legal es débil para enfrentar este delito.

Ambos defensores indicaron que si bien a la fecha no existen en México datos oficiales sobre la cantidad de niños que pudieran ser objeto de reclutamiento, el estudio hace un primer acercamiento al problema para conocer su dimensión real.