El ataque en el aeropuerto de Kabul, Afganistán, que arrasó este jueves con la multitud que intentaba ingresar a las instalaciones controladas por estadunidenses, y la cercanía del retiro del estímulo monetario extraordinario del Banco de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) consolidaron las pérdidas en los mercados accionarios y la fortaleza del dólar.

Minutos después del atentado en la capital de Afganistán, los mercados accionarios de Estados Unidos mostraron un marcado descenso, el cual no pudieron remontar al cierre de la sesión de remates de este jueves.

Tras anotaciones récord de la semana, Wall Street cerró ayer con nuevas caídas. El Dow Jones retrocedió 0.54 por ciento en los 35 mil 213.12 puntos; mientras que el S&P 500 perdió 0.58 por ciento hasta los 4 mil 470 puntos. En tanto, el Nasdaq retrocedió 0.64 por ciento, cayendo de los 15 mil puntos alcanzados esta semana.

Mientras los inversionistas analizaban las cifras de subsidios de desempleo y la nueva lectura del PIB en Estados Unidos, aprovecharon para tomar utilidades, después vino el evento en Afganistán y, para rematar, Robert Kaplan, presidente del Banco de la Reserva Federal de Dallas, declaró que las crecientes preocupaciones sobre la propagación de la variante delta no han cambiado materialmente su llamado a comenzar el proceso de retirar el estímulo monetario extraordinario del banco central en septiembre.

En México, el índice de precios y cotizaciones de la Bolsa Mexicana de Valores registró una moderada caída de 0.10 por ciento, a 52 mil 290.69 puntos.

El retroceso del principal índice accionario mexicano estuvo ligado a la caída del precio de las acciones como Cementos Chihuahua y Cementos Mexicanos, ambas con un retroceso de 1.86 por ciento; Grupo México, 1.45 por ciento; Chedraui, 1.62 por ciento, principalmente.

El dólar estadunidense aprovecha la cautela y expectativas de los inversionistas por el discurso de Jerome Powell, presidente de la Fed, en Jackson Hole, Estados Unidos, y se apreció frente a los principales cruces del mercado cambiario.

La divisa mexicana registró una depreciación frente a su similar estadunidense de 0.38 por ciento, equivalente a 7.6 centavos.