Sábado 14 de agosto de 2021, p. 7
En un estudio sobre el impacto de la pandemia en los niños, la Secretaría de Gobernación señaló que se ha registrado deserción escolar, pues 5.2 millones de estudiantes no se inscribieron en el ciclo escolar 2020-2021 por causas relacionadas con el Covid-19, y de ellos 3 millones eran menores de edad.
Destacó que el confinamiento, las restricciones a la movilidad, la suspensión de las clases y otros factores han generado afectaciones graves en los niños, entre las que se encuentran un aumento en la violencia familiar, en el número de embarazos no deseados y de suicidios.
Según el análisis, en 2020 hubo mil 150 personas que atentaron contra su vida, lo cual es una cifra récord. Ese número representa un aumento en la tasa de suicidios de 12 por ciento entre 2019 y el año pasado. El número de menores de entre 10 y 14 años que recurrieron a esa medida se incrementó 37 por ciento, y en mujeres adolescentes de 15 a 19 años, en 12 por ciento.
Alza en violencia familiar
También mencionó que ha habido un aumento significativo de la violencia familiar durante la pandemia. En el primer semestre del año, se abrieron 129 mil 20 carpetas de investigación por esa práctica, lo que representó un alza de 24 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior.
La dependencia resaltó que el año pasado, 75.78 por ciento de las lesiones ocurrieron en el hogar. 81.6 por ciento de las víctimas fueron niñas y mujeres adolescentes. En 73.29 por ciento la persona responsable tenía algún parentesco con el lesionado.
En el primer semestre de este año, los casos por parentesco alcanzaron 65.96 por ciento, y 92.8 por ciento de las víctimas eran niñas o mujeres adolescentes.
La violencia no sólo es física, sino también sexual, psicológica y económica, enfatizó.
Por lo que hace a los embarazos, dijo que en 2020 hubo 373 mil 661 nacimientos de madres adolescentes, de los cuales 8 mil 876 son hijos de niñas menores de 14 años.
Gobernación consideró que la apertura de los espacios educativos permitirá a los menores comenzar a resarcir las afectaciones por el confinamiento.
Las escuelas son espacios de formación, pero también de convivencia que permiten prevenir y detectar otros tipos de violencia, explicó.