El Congreso de la Ciudad de México colocó un candado a la gestión de los recursos del presupuesto participativo, con lo que las alcaldías podrán destinar el dinero sólo en proyectos de infraestructura pública, equipamiento y servicios urbanos.

Ayer, en sesión extraordinaria presencial, el pleno del Congreso de la Ciudad de México aprobó por unanimidad dos reformas a la Ley de Participación Ciudadana y al Presupuesto de Egresos 2021 para que las alcaldías puedan hacer uso de una bolsa de más de 2 mil 800 millones de pesos, correspondientes a los ejercicios 2020 y 2021, sólo en caso de que exista una circunstancia de índole jurídica, formal o material que impida que se desarrollen los proyectos que ya votó la ciudadanía.

Sin embargo, a raíz de una propuesta de la diputada América Rangel (PAN), los recursos se deberán destinar a infraestructura, equipamiento y servicios urbanos, con lo que se le pone un candado a las alcaldías a la hora de solicitar el recurso ante la Secretaría de Administración y Finanzas.

Asimismo, la mayoría de Morena aprobó una reserva del diputado Federico Döring (PAN) para que el Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) publique en la Gaceta Oficial a más tardar el 5 de septiembre, el porcentaje de avance de la celebración de las asambleas de información y selección, así como la constitución de los comités vecinales de ejecución y vigilancia.

Minutos antes de la aprobación de la reforma, colectivos ciudadanos advirtieron que presentarán una demanda contra las modificaciones a la ley por considerar que afectan los derechos de la ciudadanía al destinar los recursos a proyectos diferentes a los previamente votados.

De acuerdo con el órgano electoral local, hay 3 mil 470 proyectos que resultaron ganadores en los dos años mencionados.

Una de las justificaciones de la reforma era que el año pasado las alcaldías invirtieron dinero de su propia bolsa para ejecutar algunos proyectos, por lo que el cambio a la ley les permite compensar la inversión. No obstante, ninguna demarcación informó al Congreso cuántos proyectos participativos habían ejecutado.

Al respecto, Greta Ríos, vecina de la alcaldía Cuauhtémoc, calificó a las autoridades de opacas y omisas por no transparentar dicha información, lo que favorece la discrecionalidad a la hora de aplicar los recursos públicos que son de la ciudadanía.

Al desconocer los datos, dijo, se ignora el alcance que pudiera tener la reforma y cuánto dinero pueden ejercer.