buena fepara dialogar con la oposición venezolana
Lunes 7 de junio de 2021, p. 28
Caracas. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, manifestó este fin de semana disposición a acudir con buena fe
a negociaciones con la oposición, tras confirmarse nuevos acercamientos con las facciones más radicales de la derecha.
El mandatario condicionó las conversaciones al levantamiento inmediato de las sanciones de Estados Unidos y sus aliados, el reconocimiento de la Constitución y sus cinco poderes, la devolución inmediata de las cuentas bancarias secuestradas
en Estados Unidos y Europa, los activos venezolanos como Citgo o Monómeros y negociaciones públicas.
Ya no nos vamos a reunir más en secreto
, advirtió el sábado por la noche.
Vamos a sentar en la mesa de diálogo a toda la oposición venezolana. ¡Triunfo revolucionario!
, proclamó.
En el momento en que se den las condiciones, con una agenda consensuada, acordados el lugar de reuniones y los métodos de trabajo, iremos con buena fe al diálogo
.
El líder opositor Juan Guaidó, reconocido por Estados Unidos y más de 50 naciones como presidente legítimo
de Venezuela, propuso el mes pasado un proceso de negociación con Maduro, que cuente con participación de las potencias
internacionales, para lograr la celebración de elecciones libres y justas
y atajar la crisis política en la que está inmersa la república bolivariana.
La semana pasada llegó aquí una delegación de Noruega para mediar en una eventual negociación entre el Ejecutivo y el grupo opositor liderado por Guaidó.
Durante una reciente reunión de trabajo con la dirección nacional del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Maduro insistió en que este nuevo proceso debe plantear con crudeza sobre la mesa los temas nacionales.
Asimismo, exigió el reconocimiento de los poderes legítimos y constitucionales del país, incluida la Asamblea Nacional electa el 6 de diciembre de 2020, con abrumadora mayoría para el PSUV y sus aliados del Gran Polo Patriótico.
En otro asunto, Maduro dijo que el mecanismo Covax, destinado a gestionar vacunas contra el Covid-19 en países en desarrollo, tiene una deuda
con Venezuela, al acusar una demora en la entrega de 5 millones de dosis, tras destacar que el país ha cumplido con sus pagos.