Sinaloa, entidad más afectada del país, registra almacenajes de sólo 7.3 por ciento
Miércoles 12 de mayo de 2021, p. 15
La disponibilidad de agua en 16 presas de uso agrícola en siete estados productores es 57 por ciento menor a lo reportado en mayo de 2020, con un almacenamiento de 14.4 mil millones de metros cúbicos, señala una estimación del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA) con base en información de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Esta dependencia, en el reporte del Comité Nacional de Presas, indicó que hay 111 presas en el país (de 210) que no alcanzan la mitad de su llenado y su nivel es menor al promedio histórico. Esos vasos se ubican sobre todo en Sinaloa, Coahuila, Querétaro y Veracruz.
Precisó que el Sistema Cutzamala tiene un almacenamiento de 40.7 por ciento, lo cual es 22.9 por ciento menos que el promedio histórico, si bien hubo una ligera mejora con alguna precipitación en la zona y que ya llovió en Michoacán –entidad en la que se ubica la presa El Bosque–, donde no se habían reportado precipitaciones durante 2021.
También informó que la lluvia, en lo que va del año, tiene un déficit de 23 por ciento. La gravedad de la sequía se ha acentuado, ya que se encuentra entre sequía extrema, severa y excepcional 75.3 por ciento del territorio nacional, además de que ha crecido cada mes el área afectada por este problema, agregó el Servicio Meteorológico Nacional.
El GCMA evaluó la situación de 16 presas que se encuentran en Jalisco, Michoacán, Sinaloa, Tamaulipas, Sonora, Nayarit y Chihuahua, donde hay producción de granos y hortalizas, las cuales en promedio se encuentran a 30.7 por ciento de su capacidad. En su estimación, encontró que hasta principios de mayo, en comparación con la misma fecha del año pasado, esas presas tienen 57.1 por ciento menos agua.
Indicó que de las siete entidades, Sinaloa es la más afectada, pues la totalidad de sus presas se encuentran a sólo 7.3 por ciento de su capacidad; mientras, las presas de Chihuahua en promedio se encuentran a 24.6 por ciento de su capacidad.
Consideró que la falta de agua en Sinaloa redujo la superficie sembrada con maíz en el presente ciclo otoño-invierno, a la vez que la falta de riegos afectó el potencial de rendimiento y, en consecuencia, hubo una menor cosecha. Cabe destacar que esta entidad es la principal productora de maíz.
La superficie sembrada y la producción para el ciclo primavera que comienza estará sujeta en parte a la disponibilidad de agua para riego en la región del Bajío y en gran medida al comportamiento de lluvias en las zonas de temporal, indicó el GCMA.