Una de las manifestaciones más terribles de la violencia de género son los ataques con ácido. En los años recientes, la incidencia de este delito ha aumentado alrededor del mundo y se han presentado varios casos en el país.

Desde marzo de 2019 se han presentado en el Senado las situaciones de Esmeralda Millán, Nirvana Hermosillo, Carmen Sánchez y Ana Helena Saldaña, quienes después de haber sido atacadas con ácido han padecido severas consecuencias físicas. Ellas han relatado el lento y doloroso proceso que han sufrido para recuperar su salud física y mental.

Ante ello, el Senado aprobó un dictamen, sin discusión, por el que se solicitó a la Secretaría de Salud (Ssa) que brinde atención médica y tratamientos estéticos, reconstructivos y sicológicos gratuitos a las víctimas de estos ataques.

El dictamen aprobado por la cámara alta destaca que las lesiones causadas por el ácido en los tejidos y la piel son sumamente dolorosas y los daños suelen ser irreversibles, pues dejan cicatrices, a menudo en el rostro, que permanecen para siempre.

De acuerdo con la organización británica Acid Survivors Trust International, cada año se cometen mil 500 de estas agresiones en todo el mundo, y en ocho de cada 10 casos, las víctimas son mujeres.

En la mayoría de los ataques, además de las quemaduras en el rostro y el cuello puede haber daños en las vías respiratorias e incluso causar ceguera.

En cuanto a las cirugías reconstructivas y estéticas requeridas para rehabilitar a las víctimas, la consultora Frontier Economics elaboró un estudio del impacto financiero para las víctimas en Inglaterra, y estimó que, en promedio, el costo es de 63 mil libras por persona.

Esto quiere decir que, al menos, las víctimas en México requieren de un millón de pesos para su restablecimiento.

Los senadores exhortaron a la Ssa que brinde de manera gratuita servicios especializados a las víctimas en lugares cercanos a su residencia.

También le hicieron un llamado para que la dependencia, en coordinación con las autoridades locales competentes, genere un registro para dar adecuado seguimiento a cada uno de los casos.