Washington. Noah Green, acusado de atropellar con un auto el viernes a dos policías frente a uno de los controles de acceso al Capitolio, se identificó en redes sociales como seguidor del grupo radical conocido como la Nación del Islam, liderado por el polémico ministro Louis Abdul Farrakhan. Además, padecía delirios, paranoia y tendencias suicidas.

En su perfil de Facebook, Green, de 25 años, y muerto en el ataque, se declaró integrante de esta organización, descrita por la asociación de derechos civiles Southern Poverty Law Center como grupo de odio distinguido por su ideología antisemita y nacionalismo afrodescendiente. Ni la Nación del Islam ni el ministro Farrakhan han publicado su postura tras el incidente, reportó la revista Newsweek.

Mi fe es una de las únicas cosas que ha sido capaz de llevarme a lo largo de estos tiempos, y mi fe se centra en la creencia en el honorable ministro Louis Farrakhan como Jesús, el Mesías, el último recordatorio divino entre nosotros, publicó Green en su página.

Farrakhan ha sido una figura prominente y controvertida en Estados Unidos, donde ha desempeñado un papel importante en el movimiento nacionalista negro. También organizó la famosa Marcha del Millón de Hombres en 1995 en Washington.

Tras arrollar con su coche a la policía del Capitolio, Green salió del vehículo blandiendo un cuchillo, momento en que los agentes dispararon contra él. El Congreso y otros edificios gubernamentales aledaños fueron cerrados, blindados y puestos en alerta máxima, pero horas después fueron reabiertos, dejando restringida sólo la escena del crimen.

El cuerpo policial identificó al agente fallecido como William F. Evans, veterano con 18 años de servicio. El incidente se produjo a menos de dos semanas de que la policía del Capitolio retiró una cerca exterior que había cortado una amplia zona al tránsito vehicular y policial en un esfuerzo por asegurar el complejo.

El pasado 6 de enero, en plena transición presidencial tras los comicios de noviembre, miles de partidarios del ex presidente republicano Donald Trump marcharon hacia el recinto legislativo en rechazo de los resultados electorales –cuya contienda ganó el demócrata Joe Biden– y unos 800 lograron entrar en él. El violento asalto causó cinco muertos, entre quienes figuran Brian Sicknick, policía del Capitolio.

Los investigadores del caso se enfocan en los problemas siquiátricos de Green, al tratar de averiguar las razones del incidente, dijo la fuente que habló con la agencia Ap bajo anonimato. El declarante añadió que los detectives hablaron con los familiares del atacante, quienes relataron que éste sufría alucinaciones.

En mensajes colocados en Internet y ya borrados, Green expresa temores de ser controlado mentalmente por el gobierno y asegura que lo están vigilando y persiguiendo.