En 2020, la producción y la exportación de cerveza en México tuvieron su primera caída en 12 años, debido a la crisis que provocó la pandemia y a las medidas de confinamiento que obligaron a un paro en la industria por 60 días, informó Karla Siqueiros, directora general de Cerveceros de México.

En entrevista con La Jornada, indicó que el año pasado, la producción de cerveza en México fue de 118.7 millones de hectolitros, disminución de 4.7 por ciento respecto de 2019.

Refirió que las exportaciones alcanzaron una cifra de 37.6 millones de hectolitros, reducción de 6.2 por ciento al compararse con el año previo. Sin embargo, se logró un superávit comercial de 4 mil 645 millones de dólares.

Somos una industria que trabaja los 365 días del año, y haber cerrado 60 días tuvo una repercusión importante, dijo Siqueiros.

En abril y mayo del año pasado, debido al alza de los contagios de Covid-19 en el país, las autoridades tomaron la decisión de hacer un cierre de todas las actividades económicas no esenciales. En ese momento, la agroindustria no era catalogada como tal, por lo que las plantas cerveceras dejaron de operar y fueron los meses cuando hubo desabasto de la bebida.

Pese a todo, México sigue como una potencia cervecera, nos mantenemos en el cuarto lugar como productores a nivel mundial y como primer país exportador de cerveza en el mundo. Seguimos y contamos con toda la infraestructura para contribuir a la recuperación económica del país, enfatizó la directiva de Cerveceros de México.

Reconoció que entre abril y mayo toda la industria cervecera se vio muy afectada y fue una caída estrepitosa, pero la recuperación fue ágil debido a la capacidad instalada que se tiene en el país.

“La capacidad instalada usada en 2020 fue de 86 por ciento y eso nos permitió recuperar la producción. No solo nos enfrentamos a estar cerrados, también a la ley seca y las restricciones a la distribución de los productos”, señaló.

Karla Siqueiros aclaró que aun en un entorno de incertidumbre, ninguna empresa productora de cerveza cerró, ya fuese grande o artesanal, y los 700 mil empleos directos que genera la agroindustria se lograron mantener.

Así, destacó que, pese a los números obtenidos en 2020 y que el arranque de 2021 es diferente, la industria cervecera, que aporta 1.5 por ciento del producto interno bruto (PIB), confía en retomar los niveles de producción y exportaciones previos a la pandemia a la brevedad.

“Confiamos en poder retomar los niveles de producción y exportación previos a la pandemia, porque 2020 fue un año atípico y aprendimos… Esperamos retomar nuestro ritmo positivo, crecer y colaborar en la recuperación del país… Seguimos y seguiremos siendo el mayor exportador de México”, apuntó la directiva.

Aplicación de ley seca afecta a la industria

Con respecto a la ley seca y las restricciones a la distribución de la bebida que se imponen en algunas partes del país, Karla Siqueiros advirtió que tienen una repercusión sobre la industria, pero más en las cadenas de valor que se generan, por lo que se platica con el gobierno para resolver la situación.

En las tienditas o los restaurantes, por ejemplo, 30 o 40 por ciento de los ingresos provienen de la venta de la cerveza, entonces claro que nos afecta, pero no sólo a nosotros, y buscamos una solución con los tres niveles de gobierno, detalló.