La reforma en materia de subcontratación ya no puede postergarse más y debe continuar el proceso legislativo para su eventual aprobación, ya que el modelo de subcontratación propicia un daño y un fraude a los trabajadores, la hacienda pública y la seguridad social, señalaron abogados laborales.

Alberto Ramírez García, especialista en derecho laboral en la Universidad Obrera de México, indicó que el retraso en la aprobación de la iniciativa afecta incluso la misma productividad y competitividad de las empresas, ya que el outsourcing propicia la competencia desleal entre los empresarios que sí cumplen con sus obligaciones patronales.

Advirtió que las cúpulas patronales hacen todo lo posible para articular un freno al proyecto presidencial, que tiene mucha consistencia porque prohibirá una práctica que se ha convertido en un cáncer laboral.

Sobre las versiones del sector empresarial de que por falta de consensos la reforma para regular el outsourcing no avanzaría en este periodo legislativo, Ramírez García añadió que ya se generó amplia discusión con el parlamento abierto en la materia, y no hay más consensos que cumplir la ley.

Para Héctor de la Cueva, coordinador del Centro de Investigación Laboral y Asesoría Sindical, en la discusión de esa iniciativa hay señales contradictorias y con cálculos políticos, ya que una parte de los legisladores de la Cuarta Transformación estaría inclinándose por posponer la discusión hasta después de las elecciones, a pesar de que la Secretaría del Trabajo informó que la reforma saldría en este periodo legislativo.