En la actual estrategia para aligerar de forma gradual la carga fiscal de Petróleos Mexicanos (Pemex), sin afectar el equilibrio presupuestario del gobierno federal, en este año se reducirá en cuatro puntos porcentuales el derecho por la utilidad compartida (DUC), el impuesto que paga la compañía por el volumen de hidrocarburos que extrae y comercializa, al descender de 58 a 54 por ciento.

De acuerdo con cálculos oficiales, este ajuste le permitirá un ahorro de unos 83 mil millones de pesos, los cuales serán destinados al programa de inversiones de la petrolera que para 2021 sumará en total 13 mil 700 millones de dólares.

El año pasado la reducción de 7 puntos porcentales de su DUC, que bajó de 65 a 58 por ciento permitió a Pemex un ahorro estimado de 47 mil millones de pesos.

Según el plan de negocios de Pemex en 2021 se ejercerá un gasto en inversión por 13 mil 700 millones de dólares, de los cuales 5 mil 800 millones proceden de ingresos propios; 4 mil 100 millones por la reducción del DUC; mil 900 millones de dólares por aportación del gobierno federal y mil 900 millones de los privados a través del modelo de contratos de servicios integrales de exploración y extracción.

Para alcanzar estos objetivos, Pemex concretó en junio del año pasado el refinanciamiento de sus líneas de crédito revolventes con bancos por 8 mil millones de dólares, la más grande en la historia de la petrolera y del país

En esta operación 23 instituciones bancarias nacionales e internacionales la respaldaron: JP Morgan, Mizuho, HSBC, BBVA, BNP Paribas, MUFG Bank, Sumitomo Mitsui Banking Corporation, Bank of America, Bank of China, Banco Santander, Natixis, Barclays, Scotiabank, Société Générale, Credit Agricole, Citibank, ICBC, Goldman Sachs, Morgan Stanley, Banorte, ING, Banco de Crédito e Inversiones y DZ Bank.

Este acuerdo no constituyó deuda nueva para Pemex, sólo fue refinanciamiento. La operación no requirió ningún tipo de garantía ni colaterales y la tasa de interés se cerró a una tasa fija de 4.15 por ciento, nivel inferior a los niveles de fondeo de una nueva emisión en el mercado.

Adicionalmente, como resultado de la reingeniería financiera, Pemex obtuvo durante 2019 un ahorro estimado de 7 mil millones de pesos en costo financiero y 6 mil 500 millones de pesos en 2020.

Al cierre de septiembre de 2020, último dato oficial disponible, con un tipo de cambio promedio de 22.45 pesos por dólar, la deuda financiera de Pemex es de 2 billones 476 mil millones de pesos, equivalente a 110 mil 300 millones de dólares.

La recompra e intercambio de deuda efectuada en la actual administración permitió mejorar el perfil de amortizaciones, el cual ahora mantiene vencimientos de alrededor de 6 mil millones de dólares por año a mediano plazo contra un promedio de 8 mil 800 millones de dólares previos.

En la versión más reciente de la presentación de Pemex para inversionistas, detalla que durante la nueva administración se han realizado operaciones de refinaciamiento con recompra de deuda, emisión de bonos e intercambio por aproximadamente 28 mil millones de dólares.