Una vez relajado el confinamiento aumentaron los delitos en el país, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). En el segundo semestre del año pasado, 28.1 hogares de las zonas urbanas del país reportaron que alguno de sus integrantes fue víctima de robo o extorsión, 6.3 puntos porcentuales más respecto a la primera mitad del año, cuando se dio la Jornada Nacional de Sana Distancia.

En 10.9 por ciento de los hogares se registró una extorsión; en 10.5 un miembro de la familia fue víctima de robo en la calle o transporte público y en 9 por ciento se refirió robo parcial de un vehículo, muestra la Encuesta Nacional de Seguridad Urbana (ENSU), elaborada por el organismo.

Aun así, la reducción de la movilidad en las calles a lo largo de 2020 registró una caída de 7.2 puntos porcentuales en los hogares afectados por la delincuencia respecto al segundo semestre de 2019. También se redujo la percepción de inseguridad en 4.8 puntos, muestra el organismo.

En diciembre pasado, 68.1 por ciento de la población se sentía en riesgo al vivir en alguna ciudad de México, por debajo del 72.9 por ciento registrado en diciembre de 2019. Aun con ello, los datos muestran que siete de cada 10 personas temen a ser víctimas de un delito en el país.

La percepción de inseguridad es mayor en las mujeres, con 72.6 por ciento, mientras en hombres resultó en 62.7. Entre ellas, además de los robos o extorsiones, una de cada cinco padeció alguna clase de acoso o agresión sexual.

De acuerdo con los estimados del Inegi, durante el segundo semestre del año pasado 14.3 por ciento de la población fue víctima de acoso personal y/o violencia sexual. En el caso de las mujeres, este porcentaje resultó en 21.6 por ciento, mientras en hombres fue de 5.7.

En cuanto a la corrupción, el Inegi evidenció que prácticamente la mitad de la población que tuvo contacto con alguna autoridad fue víctima de ese flagelo entre julio y diciembre pasados. A escala nacional, 47.9 por ciento reportó un intento de extorsión por algún servidor público.

En Ecatepec, esta proporción salta a 83.3 por ciento, al ser uno de los municipios con los índices más altos de corrupción; en seguida se encuentran Cancún, con 83.1, y Cuajimalpa, con 70.2.

Lo mismo resulta en Acapulco, los Mochis, Tijuana, Durango, Tláhuac, Álvaro Obregón, Venustiano Carranza, Magdalena Contreras y Chimalhuacán, donde siete de cada 10 personas que se encontraron con un policía o cualquier otro trabajador público fueron extorsionadas.