Las lenguas indígenas no murieron solas, las mataron, afirma Mardonio Carballo
El poeta dio a conocer el libro más reciente de la lingüista mixe Yásnaya Elena A. Gil
Domingo 20 de diciembre de 2020, p. 5
Las lenguas indígenas no murieron solas, las mataron desde las políticas públicas hasta los emprendimientos discriminatorios de una sociedad mayoritaria
, dijo el poeta y promotor de la diversidad lingüística Mardonio Carballo durante la presentación del libro Ää: manifiestos sobre la diversidad lingüística, de Yásnaya Elena A. Gil.
Este sábado, en la charla virtual, organizada por la editorial Almadía y dirigida por la lingüista mixe, Carballo agregó que la diversidad lingüística tiene su futuro en los hablantes y en personas como Yásnaya Elena A. Gil, que pueden generar una convergencia mediática. Al mismo tiempo que hablamos a los nuestros para arroparlos y para buscar una suerte de sendero a recorrer, es importante hablar al que discrimina
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Describió la publicación como vital, pedagógica, de amor, de oráculo y sentencia
, así como memoriosa, porque recorre varios pasajes escritos de tu vida, tu conocimiento, tu trayectoria, tus formas de pensar. Me encanta ver que este recorrido tiene tanto de encuentro con tu sapiencia. Es una incursión afortunadísima en los medios de comunicación sobre el tema de las lenguas indígenas, los pueblos y todos los recovecos intrínsecos a cada lengua y cada pueblo
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Reconoció la relevancia de que “llegáramos a este siglo con 68 lenguas en México, a pesar de todo. Hemos ido ganando espacios, no nos han sido concedidos. No hay que olvidar que antes de nosotros murieron muchos compañeros y compañeras. Es una lucha en todos los ámbitos: judicial, institucional, literario… En todo”.
El también director de Culturas Populares, Indígenas y Urbanas de la Secretaría de Cultura federal pidió a los escritores en lenguas indígenas que han roto techos de cristal, no nos creamos el canto de las sirenas que dice que somos unos fregones, importantes; que la pasarela no nos vuelva superficiales, superfluos y pensemos que todo es gracias a nuestros grandes logros, nuestro empeño y nuestra grande pluma. Somos consecuencia del trabajo de muchas personas
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Carballo apuntó que Yásnaya Elena A. Gil es para él una suerte de hermana mayor y menor, y un espejo en el que me puedo reconocer y también puedo ver otras tantas formas y figuras en las cuales me siento identificado, sorprendido y siempre conmovido por tu ímpetu que siempre me ha fascinado
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En su turno, el defensor del mixe Federico Villanueva mencionó que ante la noticia del reconocimiento oficial de las lenguas indígenas en 2020, faltan los hechos. Las leyes pueden estar ahí muy bien escritas, pero si no hay hechos palpables todo sigue en el tintero
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Refirió que imagina “este libro como una casa nueva con muchas ventanitas y posibilidades. Presenta en muchos apartados escritos por Mutsk Len –Elena Pequeña, como llaman en mixe a A. Gil en Ayutla– en Facebook, en Twitter y los códigos QR, que nos abren infinitas posibilidades. Es una belleza”.
Para la escritora y editora Julieta García, el texto rescata cosas fundamentales de la vida: el respeto y el aliento de la diversidad, la búsqueda de la justicia y el respeto de los derechos. Es un libro fascinante. Tienen que acercarse al libro y a la posibilidad de empezar a valorar la diversidad lingüística
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