Con el fin de reducir los fallecimientos de pacientes por Covid-19, el gobierno federal amplió la vigencia y los términos del acuerdo con la Asociación Nacional de Hospitales Privados y el Consorcio Mexicano de Hospitales.

En esta nueva etapa, los sanatorios privados no sólo atenderán a derechohabientes con padecimientos específicos como sucedía, sino que se dispondrán de 50 hospitales con 150 camas para atender a quienes hayan adquirido Covid-19.

El presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que en México y en el mundo, aunque hay rebrotes en los contagios de Covid-19, no necesariamente se han incrementado las muertes por esta terrible enfermedad. Atribuyó esto a que hay más experiencia y medicamentos, aunque no se tenga la vacuna, pero con la participación de la iniciativa privada se avanzará en el propósito principal que es salvar más vidas.

Este nuevo convenio regirá de forma indefinida, indicó el secretario de Salud, Jorge Alcocer, quien destacó que en estos 50 hospitales se contará con la atención de los mejores especialistas, aunque las instituciones privadas continuarán atendiendo a aquellos pacientes que tengan la posibilidad de pagar por la atención.

El presidente añadió que se continúa con la reconversión de hospitales públicos para destinarlos especialmente a la atención del Covid-19, donde se encuentran los mejores médicos y especialistas, así como los equipos necesarios, como el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias. En este esquema general es que ya se le pide al sector privado que nos ayude.

Durante la conferencia –que se prolongó dos horas y media–, Hugo López-Gatell, subsecretario de Salud, subrayó que sobre el comportamiento diverso de la pandemia hay cinco entidades donde existe preocupación por su tendencia al alza en la curva epidémica: Durango, Zacatecas, Querétaro, Ciudad de México y Nuevo León.

En Chihuahua, donde aún permanecen los dos hospitales móviles del gobierno federal, se ha contenido el crecimiento de los contagios, había llegado a la máxima ocupación hospitalaria con 82 por ciento de las camas ocupadas, pero lleva tres semanas con tendencia a reducirse, por lo que podría modificar su condición actual de semáforo rojo.

Sobre el convenio, el Presidente comentó: qué bien que no nos han preguntado cuánto nos va a costar, porque eso no importa, aquí no es un asunto de presupuesto. Aquí de lo que se trata es de salvar vidas, por eso nunca van a faltar los recursos para lo fundamental, la salud del pueblo, la educación, el bienestar, la atención a la gente pobre, a la gente humilde. Ahí no hay límite.

Precisó que los pacientes, gente humilde que esté enferma (de Covid), pueden ir, de acuerdo al procedimiento que se va a dar a conocer, a un hospital, a esas 150 camas y ser atendido bien, como lo merece cualquier ser humano, y salir adelante, es decir, salvarse. Y no va a pagar nada, es parte del presupuesto público, es el recurso que se tiene, porque afortunadamente contamos con finanzas públicas sanas, para esta inversión, que no es un gasto, hay posibilidad de hacerlo.

La vacuna, pronto

En torno a la estrategia de vacunación cuando se cuente con ella, López Obrador afirmó que la Secretaría de Salud definirá el esquema que será utilizado, cuando se tenga la confirmación de qué tipo de vacunas habrá primero y sus características. Vamos a avanzar y yo espero que pronto, a finales del año, a principios del año próximo, a más tardar en el primer trimestre, empecemos ya la vacunación que nos dé tranquilidad a todos.