México alcanzó un nuevo máximo en la tasa de defunciones durante 2019, informó el Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (Inegi), con 747 mil 784 registros, 59 por cada 10 mil habitantes.

Prácticamente 9 de cada 10 personas fallecieron por una enfermedad, pero los homicidios tienen presencia como la quinta causa de muerte en el país, sólo debajo de enfermedades al corazón, diabetes, cáncer y afectaciones del hígado.

La tasa en la mortalidad producto de las cuatro enfermedades que derivan en mayor mortalidad mantuvo un alza, de acuerdo con los datos para 2019, la de homicidios se redujo de 53.4 por ciento a 52.5 por ciento con 24 casos menos que en 2018.

El Inegi desglosó que, durante 2019, 88.8 por ciento de las defunciones se debieron a enfermedades y problemas relacionados con la salud, en suma 663 mil 902 casos; 11.2 por ciento –equivalente a 83 mil 882 sucesos– se debió a causas externas.

Al revisar las defunciones tanto por enfermedad como por otra causa, el Inegi informó que, tanto para hombres como para mujeres, la principal son las enfermedades del corazón, el año pasado fueron 156 mil 41 casos, que representan 23.5 por ciento.

La segunda es la diabetes mellitus, el año pasado 104 mil 354 registros que equivalen a 15.7 por ciento de todas las muertes; mientras por tumores malignos fallecieron 88 mil 680 personas más, 13.4 por ciento.

El organismo informó que el año pasado, previo a que se declarara la pandemia de Covid-19 y se detectara el primer caso en México, la influenza y la neumonía resultaron como la octava causa de muerte en el país, con 31 mil 81 casos.

A ella, como la novena causa de muerte siguieron las enfermedades pulmonares obstructivas crónicas, 23 mil 768 fallecidos el año pasado.

El organismo detalló que del total de defunciones sujetas a vigilancia epidemiológica, 5 mil 323 correspondieron a enfermedad por virus de inmunodeficiencia humana; mil 612 casos a infecciones respiratorias agudas y 589 a enfermedades diarreicas agudas, ambas en niños menores a 5 años.

Informó que los estados con mayores tasas de defunción por habitante fueron la Ciudad de México con 70, Veracruz y Morelos, ambas con 67. En contraparte, las tasas más bajas se dieron en Quintana Roo 44, Baja California Sur 45 y Aguascalientes 48.