De la capacidad de vivienda en el Perímetro A del Centro Histórico, 75 por ciento está subutilizada, al contar con una población de 11 mil habitantes –en 4 mil 500 viviendas– mientras el perímetro B cuenta con 135 mil residentes, señaló la titular de la Autoridad del Centro Histórico, Dunia Ludlow Deloya.

En una videocharla con vecinos, destacó la importancia del Programa de Regeneración Urbana y Vivienda Incluyente como parte de la revitalización del primer cuadro de la ciudad, con el que prevé la construcción de 8 mil 300 departamentos, de los cuales 2 mil 500 serán incluyentes –con un costo de entre 400 mil a un millón 200 mil pesos—, así como 50 mil metros cuadrados de oficinas, lo que implica una intervención en el espacio público de 145 mil metros cuadrados.

Explicó que la subutilización de predios ha derivado en la generación de problemas como inseguridad pública, de allí la necesidad de redensificar el Centro de la ciudad, con el fin de generar mejores condiciones en dicha zona.

El primer proyecto que se prevé inicie obras es el denominado Puerta Sur, en el área de Plaza Tlaxcoaque; se prevé que se iniciarán las obras este año con una inversión estimada de 800 millones de pesos para la edificación de 800 viviendas de éstas, 240 incluyentes; además considera 11 mil metros cuadrados de oficinas y comercios,todo en un área de 5 mil 800 metros cuadrados.

Ludlow Deloya resaltó que el Centro Histórico tiene las mejores condiciones para su repoblamiento, toda vez que tiene un buen sistema de transporte público, cercanía a los centros de trabajo, así como una amplia bolsa de suelo.

De allí que como parte de la estrategia para redensificación que impulsa el gobierno capitalino, se incluye una inversión de 250 millones de pesos al año para la revitalización de la zona, así como generar una mayor cercanía de la policía con la ciudadanía, mejores servicios urbanos, y fortalecer el impulso de la cultura y el turismo.

Precisó que la meta para este sexenio es la rehabilitación de 366 mil metros cuadrados de espacio público, tarea en la que ya se tiene un avance de 39 de por ciento; mientras el Programa de regeneración urbana busca garantizar el derecho a la casa-habitación de las familias con menos ingresos, así como aquellos con acceso a créditos del Infonavit y Fovissste.

Recordó que el esquema consiste en que, por un lado, el gobierno simplifica los trámites, da facilidades administrativas y fiscales a los desarrolladores, quienes a cambio deben destinar al menos 30 por ciento de sus proyectos a viviendas incluyentes.