Lunes 26 de octubre de 2020, p. 27
Washington. El Senado de Estados Unidos, de mayoría republicana, decidió ayer limitar el debate sobre la designación de la juez Amy Coney Barrett a la Suprema Corte, luego de que fue nominada por el presidente Donald Trump, a poco más de una semana de las elecciones.
Por 51 votos a favor y 48 en contra, el Senado decidió no extender el debate y abrió la puerta a una posible confirmación definitiva este lunes.
Los republicanos tiene mayoría de 53-47 en la cámara alta y no hay indicios de divisiones en el partido frente a la nominación de la juez conservadora, quien remplazará a la magistrada liberal Ruth Bader Ginsburg, por lo que parece casi seguro que Barrett asumirá el cargo vitalicio a pesar de la oposición total de los demócratas.
Sólo dos senadoras republicanas, Lisa Murkowski, de Alaska, y Susan Collins, de Maine, se opusieron a limitar el debate.
Sin embargo, Murkowski declaró el sábado que todavía tiene la intención de votar a favor de confirmar a Barrett esta semana. No tengo dudas sobre su capacidad para hacer el trabajo y hacerlo bien
, afirmó.
Ningún nominado a la Suprema Corte ha sido confirmado por el Senado tan cerca de una elección presidencial. Ya se han emitido más de 58 millones de votos de forma anticipada.
Los demócratas boicotearon el jueves una votación del Comité Judicial, sin embargo, el panel decidió llevar la nominación a una definición final en el Senado.
Antes de la votación de esta noche, los demócratas expresaron su preocupación por los riesgos de contraer Covid-19, después de que varios trabajadores republicanos del Senado y otros miembros del equipo del vicepresidente Mike Pence dieron positivo.
El líder de la minoría del Senado, Chuck Schumer, apremió a los demócratas a no congregarse y a emitir sus votos rápido y desde una distancia segura
.
No estaba claro de inmediato si Pence irá al Senado hoy para la votación de confirmación, y el líder de la mayoría, Mitch McConnell, se negó ayer dos veces a responder preguntas al respecto.
Si se confirma a Barrett, la Suprema Corte tendría una sólida mayoría conservadora de 6-3 que podría durar años. A corto plazo, Barrett podría intervenir en casos sobre votos relacionados con la campaña de Trump antes o después del día de las elecciones.
Trump ha dicho que cree que la Suprema Corte decidirá el resultado de las elecciones y ha dejado en claro que quiere a Barrett en el banquillo para cualquier caso relacionado con los comicios.
El candidato demócrata a la presidencia de Estados Unidos, Joe Bien, acusó a Trump de rendirse ante el Covid-19, que ha provocado más de 225 mil muertes en el país, luego de que el jefe de gabinete de Trump, Mark Meadows, reconoció que la Casa Blanca no va a controlar la pandemia
.
Esto es lo que vamos a hacer. No vamos a controlar la pandemia, vamos a controlar el hecho de que podemos tener vacunas
, dijo Meadows a CNN. Lo que vamos a hacer es asegurarnos de tener los factores para mitigarla, ya sean terapias o vacunas o tratamientos para asegurarnos de que la gente no muera por esto
, añadió.
De inmediato, Biden aprovechó el comentario de Meadows y volvió a criticar al gobierno sobre su manejo de la pandemia, que el sábado alcanzó un nuevo récord de casos con cerca de 90 mil infectados en un día.
No fue un error de Meadows
, denunció Biden en un comunicado. Fue una constatación honesta de la estrategia del presidente Trump desde el comienzo de la crisis: agitar la bandera blanca de la derrota y esperar a que, si se le ignora, el virus se irá
, agregó.
Marc Short, jefe de equipo del vicepresidente Mike Pence, dio positivo a Covid-19 el fin de semana, el más reciente a la fecha en ingresar a la lista de colaboradores del gobierno de Trump, incluido el mandatario, que se han contagiado de coronavirus.
El equipo de campaña del magnate trataba ayer de evadir el nuevo brote de coronavirus en su grupo centrando sus ataques contra Biden, senador durante décadas y ex vicepresidente de Barack Obama, acusándolo de 47 años de fracaso
en Washington.