Viernes 16 de octubre de 2020, p. 28
Guadalupe Escalona: Sabemos que nos afecta el cierre de panteones, más por las ventas, pero consideramos que es necesario porque si no se hace las consecuencias serán más graves y ya vemos lo que está pasando: personas enfermas que se están muriendo. La situación está muy dura.
Isabel Ortiz: No es necesario que cierren los panteones, nos deberían permitir visitarlos porque es ya lo último que nos queda. Dicen que es para que no se junten, pero qué más da si estamos aquí todos reunidos afuera esperando para seguir acompañando a la familia en su pena. Da lo mismo adentro que afuera.
Guadalupe: Es inhumano que cierren los panteones porque ya es el último momento que podemos estar juntos; además, no es justo, es una pérdida, la muerte no se compensa con nada. ¿Por qué cree que se espera tanto el Día de Muertos? Para estar con nuestros seres queridos. Vemos muy mal que no nos dejen entrar a recibirlos y a marcarles su camino. Son tradiciones de muchos años y no es justo, en Santiago están cobrando 150 por aflorar la tumba, es puro negocio.
María Fernanda Sánchez Ramos: Está bien que tengan cerrados los panteones por seguridad y la gente no se enferme. Que sólo se permita a los familiares más cercanos cuando hay un entierro: tíos, primos…, pero también están los demás amigos y otra gente que se quiere despedir. Por salud está bien, pero por el dolor de la gente, está mal. Se trata de los sentimientos que genera la pérdida y prohibir que entren está muy mal.
Anselmo Rodríguez: Es una necesidad que en estos momentos no se fomenten las reuniones, pero es una pena porque son los días marcados para una convivencia familiar y nostalgia por los que ya no están. Recordarlos en los cementerios, con las comidas especiales que les gustaban, ponerles la ofrenda y aflorarles las tumbas es una fiesta. Es una tradición. Estos días sí ayudan a la reconciliación y eso es lo único que se lamenta, pero para no enfermarnos, está bien.
Miguel Ángel Rodríguez Calvillo: Hacemos lo que le gustaba afuera del panteón porque no nos dejaron entrar. Mucho ruido con las motos es lo que le ofrecemos para que se vaya contento. A él le gustaba el escándalo y de lo que se trata es darle una buena despedida. Como no dejan entrar, aquí afuera le vamos hacer de todo.