Aunque el cierre del proceso de liquidación de Ferrocarriles Nacionales de México (FNM) está programado para mediados del próximo año, varias obligaciones que son de ­largo plazo, entre ellas el pago a los más de 20 mil jubilados, los pasivos laborales pendientes, que son por cerca de 6 mil millones de pesos, y las obligaciones para reparar daños al medio ambiente que provocó la extinta paraestatal y que ascienden a mil millones de pesos, serán transferidas a otras instancias de gobierno.

Así lo señala el Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (Indep), en un informe al Senado sobre ese proceso de liquidación que inició en septiembre de 2010 y una década después no ha podido concluir.

La privatización ferroviaria, que llevó a cabo el entonces presidente Ernesto Zedillo, empezó en 1995, y en septiembre de 2010, a dos meses de dejar el cargo, publicó el decreto por el que se liquidó a FNM, empresa que siguió gravitando sobre las finanzas públicas, ya que se creó incluso un fideicomiso en 1997, administrado por el sindicato ferrocarrilero, para el pago de pensiones a lo ex trabajadores del riel, que año con año recibía recursos del gobierno.

En los inicios de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador se dejaron de transferir recursos al sindicato ferrocarrilero –que eran por 18 millones de pesos anuales– y la administración del fideicomiso recayó en el Indep, organismo que este año gestionó recursos por mil 335 millones de pesos para el pago de las pensiones en el primer semestre de este año a 23 mil 571 jubilados.

En el informe que entregó al Senado, el Indep considera que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes es la que debe asumir esa responsabilidad, toda vez que la Comisión Intersecretarial de Gasto Público, Financiamiento y Desincorporación acordó en octubre de 2018 que el proceso de liquidación de FNM deberá concluir en el primer semestre de 2021.

Están pendientes, sin embargo, 3 mil 668 juicios laborales, que a lo largo de una década han interpuesto ex trabajadores ferrocarrileros por salarios caídos, petición de pensiones o incremento de las mismas, por los que se deberán pagar 5 mil 993 millones de pesos.

El Indep resalta en su informe, que se deberán transmitir las obligaciones en materia ambiental de FNM, que requieren mil 27 millones de pesos, aunque 27 de los 35 sitios pendientes de remediar se encuentran en áreas concesionadas.

Asimismo, se tendrá que decidir el destino de los enormes activos remanentes de FNM, que serán donados o vendidos. Hasta junio pasado había 2 mil 186 solicitudes de donación, 77 de ellas presentadas en el primer semestre de este año, 65 de jubilados ferrocarrileros y sucesores.

De enero a junio de este año se donaron 724 inmuebles, 718 al Instituto Nacional del Suelo Sustentable, con una superficie de más de 37 millones de metros cuadrados, y otros seis a jubilados por un millón 145 mil metros cuadrados. De los 550 bienes transferidos al Indep para su comercialización, se vendieron 111, por un monto de 310 millones de pesos.