La investigadora Laura Alicia Palomares destaca el apoyo del Gobierno capitalino para nuevo laboratorio
Jueves 20 de agosto de 2020, p. 4
Si bien el gobierno federal ha anunciado la participación de México en la producción de la potencial vacuna contra el Covid-19 desarrollada por la Universidad de Oxford y un laboratorio privado multinacional, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) continuará trabajando en la producción de un biológico local.
Laura Alicia Palomares Aguilera, del Instituto de Biotecnología (IBt) y corresponsable de la vacuna que desarrollan por su cuenta la UNAM y el Gobierno de la Ciudad de México, indicó que ésta va adelante y se trabaja como un rompecabezas.
“Una de las piezas es el apoyo del Gobierno de la Ciudad de México para la construcción de un nuevo laboratorio en la UNAM, el cual tendrá un nivel de seguridad 3 (BSL-3), lo que nos permitirá realizar pruebas en condiciones controladas.
Estará ubicado en Ciudad Universitaria; por el momento, se encuentra en planeación y esperamos que esté listo en un par de meses
, indicó la especialista, de acuerdo con la Gaceta UNAM.
Palomares Aguilera consideró que México tendrá una gran oportunidad, técnicamente relevante
, en la fabricación de la vacuna contra el SARS-CoV-2, al emprender la parte farmacéutica en la producción de la vacuna de la Universidad de Oxford, correspondiente al acondicionamiento del principio activo (API) del medicamento con el propósito de que sea aplicado a los pacientes.
Un medicamento siempre está dividido en dos partes. Una es la fabricación del principio activo, el cual llamamos API, y la parte farmacéutica. Estas dos operaciones se manejan normalmente de manera separada y requieren capacidades diferentes, pero no por eso son menos importantes una de otra
, agregó.
La investigadora universitaria aclaró que aun cuando algunos integrantes del IBt colaboran en otros proyectos con los Laboratorios Liomont –que participa en la producción de la vacuna extranjera–, en esta ocasión la UNAM no está involucrada directamente en la transferencia ni en la fabricación de este desarrollo, que originalmente proviene de la Universidad de Oxford.
La investigadora del campus Morelos de la UNAM indicó que en la Universidad de Oxford trabajan en una plataforma desde hace varios años, en la que utilizan virus de chimpancés como vacunas.
Esto es lo que llamamos una vacuna vectorizada, porque si se utilizaran adenovirus humanos es posible que obtuviéramos anticuerpos, y entonces la vacuna ya no sería eficiente
, apuntó.