Domingo 16 de agosto de 2020, p. 10
Para el Consejo Nacional Agropecuario (CNA), muchas medidas antiobesidad son atentados contra las libertades
.
Bosco de la Vega Valladolid, presidente del CNA, cuestionó que la administración federal, por medio de la subsecretaría de Prevención y Promoción de la Salud, y los gobiernos estatales puedan determinar qué se debe comer. Al rato nos van a decir qué podemos vestir y qué no, y adónde podemos salir o si podemos tomar tal cosa o no
, criticó.
Dijo a La Jornada que reformas como la de Oaxaca, que prohíbe la venta, regalo o suministro de bebidas azucaradas y productos ultraprocesados con alto contenido calórico a menores de edad, nos afecta porque nos van a comprar menos, vamos a tener más mermas
.
Etiquetado frontal
Sobre el etiquetado frontal de advertencia, expresó: Van a traer etiqueta todas las barras de mantequilla, y de esas barras sólo te comes una o dos rebanadas, pero se considera que te comes toda. Igual las piernas de jamón, y además no permite la reformulación ni el cambio de porciones. Esto no fue en consenso con la iniciativa privada; están imponiendo medidas que están afectando, quieren satanizar los alimentos
.
Lina Pohl, representante en México de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), resaltó la importancia del etiquetado y el ambiente obesogénico. Algunos dicen que es problema de decisiones individuales; en parte es cierto, pero sobre todo influyen los ambientes que son más propicios para que las personas no cubran adecuadamente los requerimientos nutricionales
. Agregó: Vemos bien el esfuerzo de México, es uno de los pocos países que es ejemplo, junto con Chile y Ecuador, está a la vanguardia
.
Recordó que la FAO, OPS/OMS, Unicef, el Instituto Nacional de Salud Pública y el Grupo Intersecretarial de Salud, Alimentación, Medio Ambiente y Competitividad elaboraron un documento “a solicitud del gobierno para analizar esta situación sobre mala nutrición. Nos dijeron: ‘queremos recomendaciones de política pública, no sólo un diagnóstico’”.
El costo de la obesidad equivale a 10 veces el presupuesto de la Ssa, nos cuesta a todos 1.3 billones de pesos
, señaló Katia Maldonado, coordinadora de salud alimentaria de El Poder del Consumidor.