Miércoles 29 de julio de 2020, p. a11
Hace tiempo que el mexicano Gilberto Zurdo Ramírez pretende dar el gran salto al éxito en el boxeo. La puerta de entrada infalible sería Saúl Canelo Álvarez, peleador instalado en la cúspide deportiva y financiera. La fila de aspirantes, por tanto, es larga y el pelirrojo toma su tiempo para elegir al rival más conveniente, pero ha dicho que no quisiera enfrentar más a boxeadores mexicanos.
“Es absurdo que Canelo Álvarez ya no desee pelear con mexicanos”, protesta el sinaloense, quien el año pasado dejó vacante el título supermedio de la Organización Mundial de Boxeo. Ya se sabe que cuando dos mexicanos se enfrentan hay espectáculo asegurado. Esta sería una pelea natural, porque la gente quiere verla
, insiste; podríamos llenar el estadio Azteca
.
El Zurdo es un peleador conocido en las carteleras estadunidenses, aunque aún no se ha instalado en esa élite donde los combates tienen grado de suceso y generan cantidades desaforadas de dólares.
Creo que me han faltado más campeones en mi lista de rivales
, piensa Ramírez; necesito pelear con nombres más famosos para llegar al estrellato que quiero, pero se va a dar, tarde o temprano
.
Si la lista de espera es abultada ante la puerta del Canelo Álvarez, el sinaloense considera que tiene la estrategia para llegar a un acuerdo. Zurdo Ramírez terminó su contrato con la empresa que lo representaba y ahora conducirá él mismo su carrera. Eso supone que le abrirá opciones más lucrativas.
“Voy a presentarme con los representantes del Canelo”, anticipa; hablaré de promotor a promotor; voy a hacer un trato con ellos. Así es como se puede hacer esa pelea
.
Además confía que la afición presione para que la combinación se haga cada vez más atractiva, pues en sus cálculos puede inclinar la balanza en su favor.