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En número especial, la Revista de la Universidad explora la diversidad en el sexo

Frente la emergencia sanitaria, se agregó la visión particular del encierro

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▲ Portada de la edición especial.Foto cortesía de la Revista de la Universidad de México
 
Periódico La Jornada
Miércoles 22 de julio de 2020, p. 5

Ante la pandemia de Covid-19 es encomiable que las autoridades sanitarias no tomaran medidas persecutorias contra las personas que permanecían en la calle; al menos la Ciudad de México es un espacio para la autonomía sexual y ciudadana en general, expresa Nayeli García, jefa de redacción de la Revista de la Universidad de México, que dedicó al sexo su número de verano.

Esta situación de autonomía ciudadana en general se puede ocupar desde la represión y el diálogo, desde enterarse, leer y conocer, teniendo responsabilidad individual para el cuidado colectivo. Eso es algo bueno, expresó García a La Jornada.

El número especial de la Revista de la Universidad de México, que será presentado en línea el de 29 del julio, ya estaba planeado antes de la emergencia sanitaria, con la finalidad de dar un paseo por las múltiples formas de expresión sexual.

Siguieron el plan original de la revista, pues el 28 de marzo y el 30 de junio publicaron un diario de la pandemia, que abordaba lo que estaba pasando y dio voz a grandes escritores sobre la situación. Ese es un gran escaparate para ver diversas experiencias, como escuchar a tus vecinos teniendo relaciones sexuales o pelearse, fantasear con cosas en la televisión o vivir la vida conyugal en el encierro. Unas 90 entradas, ilustradas y firmadas.

García relata que quisieron sacar la edición especial en verano, cercana al Mes del Orgullo, para “aportar en la discusión y aportar visualmente. En las imágenes nos permitimos jugar bastante, desde la portada, que presenta varias posiciones de copulación, hasta en las imágenes que están en los contenidos hay algo de jiribilla y de cachondez.

El dosier, sostiene la jefa de redacción, estuvo enfocado “en hablar de la diversidad desde una visión interdisciplinaria. Una de las adecuaciones que hicimos ante la emergencia fue la adición de la infografía Sexting seguro. Partimos de que personas jóvenes y quizá menores de edad están experimentando su sexualidad por medio de las plataformas digitales y quisimos dar un recurso pedagógico”.

También tratamos de llevar al lector a mundos que no necesariamente conociera; por ejemplo, hablar de la diversidad sexual en los animales, en las formas que tienen para reproducirse, su relación con fenómenos importantes para los humanos, como la monogamia o la poligamia y el sexo entre animales del mismo sexo u opuesto.

García menciona que tuvieron cuidado, pues son temas de los cuales es delicado hablar, pero convocamos a una serie de expertos para que pudieran abordarlos, por ejemplo, la crónica bastante descarnada de Wenceslao Bruciaga sobre las orgías gays en el contexto de la cuarentena.

Hay otro texto muy sensible sobre la educación sexual de las personas con discapacidad intelectual, a cargo de Aranxa Bello, y uno más en torno a una consultoría sicológica de la Universidad Johns Hopkins en Estados Unidos, que da atención a personas pedófilas que no han cometido ningún crimen sexual; es decir, personas que se sienten atraídas por menores pero no quieren llevar a cabo su fantasía.

Agrega que el sexólogo César Galicia “ayudó a definir ‘sexo’ como las prácticas en las que el ser humano y los animales experimentan su sexualidad y también como las características biológicas de los cuerpos a los que se les asigna un sexo”.

El trabajo de Diego Golombek “habla del espectro sexual y tira un poco esta noción de que sólo existen XX y XY como dos tipos de cuerpos. Intentamos partir de la noción biológica de sexo y extenderla a las prácticas sexuales, y además hablar de la complejidad que hay en una visión dicotómica, dónde sólo hay niñas y niños, y abrir espacios para la diversidad. En prácticas sexuales no hablamos únicamente de sexo como coito o la relación sexual entre dos personas de sexos opuestos, sino entre personas del mismo sexo, masturbación femenina, trabajo sexual y placer anal.