Budapest. Un dominante Lewis Hamilton se adjudicó el Gran Premio de Hungría por octava ocasión, para igualar el récord de Michael Schumacher en un solo circuito de la Fórmula 1 y tomar la delantera del campeonato.

El británico, quien partió desde la pole position, estuvo acompañado en el podio por el holandés Max Verstappen (Red Bull), protagonista de una gran actuación tras haber comenzado en el séptimo lugar y pese a un accidente a 15 minutos de la salida –en el que dañó su auto–, y por el finlandés Valtteri Bottas (Mercedes), tercero.

El séxtuple campeón mundial consiguió además el punto extra por la mejor vuelta de la carrera y se puso al frente del campeonato, ahora con cinco unidades de ventaja sobre Bottas, quien había llegado a Hungría como líder.

Poco después del inicio, los pilotos cambiaron los neumáticos lisos para condiciones húmedas, causando una gran actividad.

La victoria de Hamilton fue cómoda, lo que quedó evidenciado en los nueve segundos de ventaja que sacó sobre Verstappen. Fue su triunfo 86 y acecha el récord de Schumacher, de 91.

El alemán conquistó el GP de Francia ocho veces cuando se llevó a cabo en el circuito de Magny-Cours. En 2007, Hamilton ganó por primera vez en Hungría y su triunfo número uno con Mercedes también fue en la pista de Hungaroring en 2013, un año después de remplazar al teutón en el equipo.

Era algo disparatado imaginarse que esto pudiera ser realidad. Recuerdo ver a Michael en la televisión ganar todas sus carreras, dijo el británico. Me estoy acercando a su cantidad de victorias, lo que sólo me sirve para recordar el dominio y la excelencia que mantuvo por tanto tiempo. Entiendo la presión con la que debía lidiar. Es algo muy admirable.

Verstappen, por su parte, manejó soberbiamente y se llevó las palmas como el piloto del día. Red Bull apenas logró tener listo el monoplaza del holandés para el arranque de la carrera. Sus mecánicos solucionaron el problema en 15 minutos, cambiando el alerón y reparando el tren delantero izquierdo, que se habían dañado al chocar con una barrera de seguridad.

Su compañero tailandés Alexander Albon llegó en el quinto lugar. Las Panteras rosas de Racing Point, que salían desde la segunda línea, se mostraron menos eficaces que en la clasificación. El canadiense Lance Stroll fue cuarto y el mexicano Sergio Pérez, séptimo.

Los Ferrari del alemán Sebastian Vettel y el monegasco Charles Leclerc quedaron sexto y undécimo, respectivamente, y el español Carlos Sainz (McLaren) alcanzó el noveno puesto.

En los preámbulos de la carrera y como se planea hacer toda la temporada, Hamilton y otros 15 pilotos volvieron a poner una rodilla en el suelo como gesto contra el racismo. El resto se mantenía de pie.

El británico criticó una vez más a sus compañeros por la falta de solidaridad. No existe suficiente apoyo. Creo que quizás hay personas que no han crecido lidiando con este tema y no lo entienden.