La titular de la Coordinación Nacional de Teatro, Marisa Giménez Cacho, visualiza el retorno del espectador a las salas de arte escénico como un proceso doloroso, un periodo muy fuerte y no muy agradable, ya que reducirá el ingreso a 30 por ciento del aforo para brindar al público condiciones de seguridad.

En la presentación virtual de la quinta edición del Congreso Nacional de Teatro, que se realizará el 26 y 27 de septiembre, y el 3 y 4 de octubre, la creadora escénica expresó que en el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura se han elaborado muchos protocolos para reiniciar las actividades, aunque aún no hay una fecha establecida para el regreso.

Comentó que acatarán las indicaciones de las autoridades de salud y se aplicarán las medidas de sana distancia y la gente tendrá que asistir con cubrebocas, aunque consideró que eso “se contrapone mucho con lo que es el teatro, que es estar abierto al contacto de la experiencia humana y las emociones.

El gran reto es el miedo que pueda tener la gente de acudir a una sala; para paliarlo y dar certezas y seguridad debemos tener las medidas de sana distancia, que me resultan muy dolorosas cada vez que veo los teatros con cinco butacas vacías y una ocupada, pero ni modo, es la única forma de dar condiciones mínimas de seguridad al público.

Giménez Cacho indicó que los teatros grandes del Centro Cultural del Bosque (CCB) funcionarán mejor porque tienen mayor espacio, más butacas, pero salas como la CCB y la Xavier Villaurrutia no ofrecerán funciones por ser espacios muy cerrados y con aforo compacto, añadió la coordinadora.

Al referirse a la sana distancia en las compañías expuso que será complicado, porque los actores no pueden ensayar con cubrebocas ni realizar las escenas con el metro y medio de distancia que se recomienda. Hay retos importantes y serán las propias compañías y los directores los que marquen la pauta. Seguramente se realizarán pruebas de salud a todos los que integran la compañía artística, para ver en que términos pueden trabajar sin que se generen contagios.

Giménez Cacho explicó que están pendientes del semáforo epidemiológico; sin embargo, entre los protocolos a seguir ya tienen definido cómo será el aforo en determinados recintos. “Ya analizamos eso, ya sabemos cuánta gente podrá entrar al teatro Julio Castillo, al Orientación. También tenemos una lista de las obras que podrían comenzar y hemos hablado con algunas compañías; sin embargo, la fecha de reinicio no la tenemos, porque depende del semáforo.

El trabajo interno de establecer los protocolos, de tener movimiento de entradas y salidas del público, de actores y de técnicos, y filtros sanitarios, todo eso ya lo hemos trabajado y ya está prácticamente listo.