La Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México inició una carpeta de investigación por el robo de 67 equipos celulares usados, propiedad de la administración capitalina, los cuales fueron sustraídos del edificio virreinal, donde despacha la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum.

De acuerdo con la indagatoria CI-FICUH/CUH-2/UI-1 S/D/00782/07-2020, la sustracción de los aparatos Motorola, modelo G5 Play, se produjo presuntamente el 13 de julio de la oficina ubicada en el número 213, pero la denuncia se presentó tres días después.

El denunciante señaló que el sábado pasado se presentó a trabajar y al retirarse cerró la puerta con llave, pero el lunes, al acudir a sus labores, observó que la cerradura fue forzada, por lo que informó al personal de vigilancia.

Los guardias acudieron a su llamado, pero no encontraron a nadie dentro de la oficina, y le informaron que no se percataron de algún movimiento irregular durante el fin de semana, en el cual presume se realizó la sustracción de los aparatos.

Tras ingresar en la oficina, localizada en el edificio de Plaza de la Constitución número 2, dijo que revisó si había algún faltante, y detectó que no estaban los 67 celulares, pero apenas ayer en la madrugada requirió la intervención del Ministerio Público.

El representante social dio intervención a policías de investigación y personal de la Dirección General de Servicios Periciales, quienes acudieron al lugar a realizar entrevistas y recabar pruebas para integrarlas a la carpeta de investigación relacionada con este caso.

No hay cámaras

De acuerdo con lo declarado por el encargado de la Subdirección de Compras, en el edificio no se cuenta con cámaras de vigilancia, por lo cual no se puede verificar quién o quiénes estuvieron en esa oficina después de que él salió.

La titular de la FGJ, Ernestina Godoy Ramos, ordenó una investigación exhaustiva para dar con él o los responsables de dicho robo.

Como medida de seguridad, las personas que ingresan al edificio virreinal, como al del Antiguo Palacio del Ayuntamiento, deben pasar por un arco detector de metales y sus cosas son colocadas en una banda para ser revisadas, y a la salida nuevamente pasan por otro detector y uno de los guardias pide a la gente mostrar el interior de sus mochilas o bolsas.