Santiago. Bastó que el gobierno chileno pareciera echar las campanas al vuelo por lo que describe como leve mejoría o pequeñas señales de que los contagios decrecen y la peste afloja, para que la presidenta del Colegio Médico, Izkia Siches, advirtiera acerca del falso triunfalismo y los riesgos de repetir errores de relajamiento que colocaron al país entre los cinco con mayor tasa mundial de contagios.

El optimismo gubernamental se sustenta en que la cifra de infectados, medidos por pruebas PCR realizadas diariamente, declinó entre 30 y 40 por ciento, que marcaba hace dos o tres semanas, a 25 por ciento, en Santiago –ciudad en cuarentena total desde hace casi dos meses–. Ese mismo indicador sube en otras regiones y/o ciudades a tasas de 40 por ciento actualmente.

La urgencia de mostrar avances se sustenta en la economía que cayó 14 por ciento en abril, en mayo se hundió otro 15 por ciento, mientras para junio se proyectan cifras peores. El desempleo supera 11 por ciento de la fuerza laboral y alcanza a cerca de un millón 500 mil personas. Urge entonces rencender la actividad, plantean desde el oficialismo.

Chile tiene casi 285 mil contagios –de los cuales, 35 mil activos– y 5 mil 920 fallecidos, según las cifras oficiales, aunque hay otras 4 mil muertes reportadas como probables por Covid-19 a la Organización Mundial de la Salud, porque a los fallecidos no se les realizaron pruebas.

Para muchos especialistas, la merma en la tasa de contagios destacada por el Ministerio de Salud coincide casualmente con la disminución a la mitad de las pruebas diarias practicadas para detectar el nuevo coronavirus. En efecto, desde el máximo de 23 mil diarios realizados hacia fines de junio –y que colocan a Chile con un millón 200 mil reactivos procesados entre los países con mejor indicador–, hoy se efectúan poco más de 10 mil.

Nos preocupa mucho el impacto del lenguaje porque las personas han tenido mucho tiempo de confinamiento, todos estamos un poco ansiosos de salir de nuestras casas y los mensajes pueden ser contradictorios, señaló la doctora Siches a Radio Cooperativa.

“Vemos que ha existido una disminución en los PCR positivos, pero lamentablemente sigue siendo muy alto. Chile debería aspirar a menos de 10 por ciento de positividad y seguimos alrededor de 25 por ciento. Es un poco contradictoria esta leve mejoría (…), nos preocupa mucho la disminución en la aplicación de análisis químicos, porque es parte del corazón de la estrategia. Si nosotros no diagnosticamos, obviamente no vamos a obtener muy buenos resultados”, comentó.

Oficialismo defiende cifras

Pero el gobierno de Piñera rechazó el pedido de prudencia y, por boca de su ministro de Salud, Enrique Paris, aludió que “en días pasados hemos informado que las cifras que apoyan lo que hemos llamado ‘leve mejoría’ se sostienen justamente en datos que informamos. Y los datos a escala nacional son buenos, le duela a quién le duela”.

En contrapartida, el Colegio Médico pone énfasis en la urgencia de ejecutar una estrategia de trazabilidad de altos estándares para los casos positivos y los recuperados, porque ya no hay espacio para errores.

“Vamos a ser muy críticos de hacer un montaje de trazabilidad ‘a la chilena’ (poco seria); los países con mejores resultados lo han hecho con estándares muy altos y a eso debemos aspirar”, estableció.