Miércoles 1º de julio de 2020, p. 21
Durante mayo de 2020, la cartera de crédito vigente al sector privado de la banca comercial registró un crecimiento anual de 5.3 por ciento; sin embargo, en su interior, el financiamiento al consumo, es decir, a las familias, reportó una caída de 4.2, reflejo de la pandemia de Covid-19, revelan datos del Banco de México (BdeM).
Según el reporte Agregados monetarios del banco central, los demás rubros de la cartera de crédito vigente registraron alzas: vivienda, 6.2 por ciento, y financiamiento a empresas y personas físicas con actividad empresarial 8.5, de forma anual, en mayo pasado.
En el rubro del consumo, el segmento más afectado durante el quinto mes del año fue el de tarjetas de crédito, con una caída de 8.2 por ciento, seguido por los financiamientos personales, con 7.7.
La cartera para la adquisición de bienes de consumo duradero se incrementó 1.4 por ciento, y los créditos de nómina quedaron estancados.
De acuerdo con analistas de Intercam, el repunte del crédito se debe a que las empresas solicitaron financiamiento para tener liquidez; sin embargo, la disminución en el segmento de consumo es indicativo de que la tendencia a largo plazo es de desaceleración, principalmente por el desempeño de la economía nacional.
Explicaron que la contracción del crédito al consumo es porque, consecuencia de la pandemia, varios establecimientos permanecen cerrados, además de que algunas instituciones financieras han limitado o disminuido el crédito, ya que probablemente varios clientes no podrán pagar sus adeudos total o parcialmente.
A mayo pasado, reporta el BdeM, el saldo del financiamiento otorgado por la banca comercial se ubicó en 7 billones 771 mil millones de pesos, lo cual representó un incremento de 8.4 por ciento de manera anual.
De los componentes de ese indicador, el financiamiento al sector privado, que constituye 67 por ciento del total, fue de 5 billones 232 mil millones de pesos y aumentó 5.2 por ciento.
El que corresponde al sector público federal, que representa 23 por ciento del total otorgado por la banca comercial, se situó en un billón 791 mil millones de pesos, es decir, una variación positiva de 24.5 por ciento.
El saldo del financiamiento a estados y municipios, con una participación de 4 por ciento del apoyo total, se ubicó en 313 mil millones de pesos, o sea, una disminución de 3.5 por ciento.
En lo que se refiere al otorgado por la banca de desarrollo, en mayo tuvo un crecimiento real anual de 3.4 por ciento.
Dentro de ese indicador, el respaldo al sector privado tuvo un alza de 3 por ciento; el del sector público federal un incremento de 6.9, el destinado a estados y municipios un aumento de 3.9, y a otros sectores una baja de 4.8.
Por otra parte, al cierre de mayo la base monetaria (billetes y monedas en circulación y depósitos bancarios en cuenta corriente) se ubicó en un billón 850 mil millones de pesos, lo que implicó un alza real anual de 14.3 por ciento.