Mexicali, BC., Este lunes a primera hora representantes del Grupo Aeroportuario del Pacífico (GAP), concesionario del Aeropuerto Internacional de Tijuana (AIT) Abelardo L. Rodríguez, pagaron 32 millones 427 mil 921 pesos a la Comisión Estatal de Servicios Públicos de la ciudad (Cespt) por concepto de cinco años de cuentas pendientes, informó el gobernador Jaime Bonilla Valdez, quien aseguró que con esta acción se prueba el adeudo.

Al mostrar los cheques por diferentes cantidades, detalló que los representantes (cuya identidad no dio a conocer) llegaron la noche del domingo y, tras reconocer el pasivo, lo cubrieron.

El conflicto entre el gobierno de Baja California y GAP, de capital español, se debía a que éste desconocía la deuda y aseguraba que tenía derecho al agua de pozo para el AIT.

Con la liquidación de la deuda, la Cespt normalizó el suministro de agua potable a la terminal aérea, lo que permitirá el uso de sanitarios y otras instalaciones de atención al público.

En litigio también se encuentra el pago del impuesto predial, pues desde 1999 la empresa concesionaria ha acumulado una deuda de 720 millones de pesos.

También se exhibió que la terminal fronteriza tiene un drenaje clandestino por el que arroja líquido residual sin tratar a un canal pluvial, por lo que el mandatario ha advertido que debe intervenir la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales, ya que el líquido no sólo contamina ese municipio, sino que llega hasta las costas de California.

Debido a estas irregularidades el AIT enfrenta denuncias por delitos ambientales.

Bonilla Valdez ha solicitado en dos ocasiones al gobierno federal que quite la concesión al GAP, pues durante una revisión se detuvo a un inspector durante 12 horas y se detectó que se servía alimento caduco en los aviones.

El mandatario morenista, además, acusó a los gobiernos panistas de simulación de pagos y saqueo a las arcas y al patrimonio de la Cespt.

En este contexto, con el propósito de resolver la situación irregular de los locales comerciales en la terminal aérea, este lunes se logró un acuerdo entre el alcalde de Tijuana, Arturo González Cruz, y el director de GAP, Raúl Revuelta Musalem.

El convenio consiste en permitir que empleados municipales revisen los giros comerciales del aeropuerto para corroborar que cuenten con permisos de operación y de venta de bebidas alcohólicas, además de que un centenar de negocios inicien su proceso de regularización, ya que carecen de licencias.

Con información de La Jornada Baja California