Julio César N, Julio N –líder de la Unión de Comerciantes Independientes del Centro Histórico– y su hijo Abraham N, a quienes se les conoce como Los Rico y que fueron detenidos por su presunta responsabilidad en los delitos de privación ilegal de la libertad en su modalidad de secuestro exprés y extorsión, permanecerán en el Reclusorio Sur luego de que un juez de control les dictara prisión preventiva oficiosa.

A petición de los presuntos responsables, el juez concedió la ampliación del término constitucional para que se defina su situación jurídica, por lo que la próxima cita para continuar con la audiencia será el próximo martes a las 17 horas.

El secuestro exprés es considerado como delito grave, por lo que el juzgador dictó la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa.

En la misma audiencia y como parte de la carpeta de investigación de la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México, al ex agente Juan Tomás N también se le dictó prisión preventiva oficiosa luego de ser acusado de dar protección al comerciante y a su vástago.

Además, las autoridades de procuración de justicia cuentan indicios de una presunta relación de el judicial con Óscar Andrés N, El Lunares, líder de la Unión Tepito, quien está preso en el Reclusorio Oriente, a quien presuntamente daba protección, así como a Carlos Iván N, El Santero.

El jueves pasado, efectivos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana y de la FGJ cumplimentaron dos órdenes de aprehensión y realizaron tres cateos en inmuebles de las colonias Centro y Roma Sur, donde detuvieron a Julio y a su hijo.

De acuerdo con información de la fiscalía, tras diversas denuncias ciudadanas, así como de investigación de campo y de gabinete se logró ubicar a ambos sujetos, quienes presuntamente obtendrían recursos económicos mediante la extorsión y amenazas a comerciantes del Centro Histórico de la Ciudad de México.

Julio heredó el control de los comerciantes ambulantes en el Centro histórico, en la alcaldía Cuauhtémoc, por parte de su madre Silvia Sánchez Rico, quien a su vez lo recibió de Guillermina Rico, cuyo liderazgo entre comerciantes se remonta a la década de los 80.

Sobre el ex policía de investigación, se informó que posiblemente brindaba protección a Julio y a su hijo, además de que probablemente coordinaba el control de los cobros de derecho de piso, extorsión y secuestro a comerciantes de las calles del primer cuadro.