En la llamada nueva normalidad, las instituciones de educación superior del país enfrentarán retos en materia sanitaria, tecnológica y financiera, por lo que es necesario fortalecer vínculos de cooperación e intercambio de experiencias, se dijo durante el foro virtual Innovación educativa pos Covid-19.

Eduardo Peñalosa, rector general de la Universidad Autónoma Metropolitana; Francisco Cervantes Pérez, rector de la Universidad Internacional de La Rioja en México, y Alma Herrera Vázquez, directora general del Instituto Rosario Castellanos, plantearon la conveniencia de constituir un consorcio universitario metropolitano, que incluso pudiera trascender las fronteras de la capital del país.

Siempre he pensado que debemos actuar juntos y, en este caso, los modelos educativos de las tres escuelas son presencial, a distancia y semipresencial, respectivamente, así que podríamos aprovechar la labor grupal, dadas las características de las escuelas e incluso encontrar la manera de beneficiar a las demás, señaló Peñalosa.

También es viable, añadió, pensar en que la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación (Secteci) nos aglutine a través de su red ECOs, que reúne a más de 40 instancias de este nivel de enseñanza y que ha ido en el rumbo de la integración del trabajo conjunto y el conocimiento.

Explicó que la idea sería compartir algunas formas de docencia, investigación, difusión de la cultura y gestión, así como ofrecer cursos y licenciaturas comunes, tener dobles o triples titulaciones, contar con modelos de movilidad virtual –algo que en el contexto de la pandemia y la nueva normalidad será indispensable– y crear laboratorios o chat vox, una especie de tutor inteligente que lleve de la mano a los alumnos.

Un futuro consorcio interinstitucional metropolitano para el aprendizaje podría impartir cursos de educación continua y otros para atender materias de alta reprobación, formar docentes comunes y propiciar seminarios de indagación y proyectos sobre Covid-19, entre otros asuntos, propuso.