Hopelchén, Cam., Apicultores de la península de Yucatán fueron golpeados severamente por el paso de la tormenta tropical Cristóbal, debido a que las recientes lluvias destruyeron un trabajo de 15 años, al arruinar 200 colmenas de abeja melipona, dijo Leydi Pech Martín, originaria de Hopelchén.

La apicultura ha sufrido un enorme daño con este meteoro. Todo Hopelchén está bajo el agua, afirmó. Cristóbal también causó inundaciones en sus calles, viviendas, destrucción de los apiarios, colmenas, cultivos y la dispersión de animales de traspatio y ganado, describió la mujer de origen maya.

Apenas hace unas semanas, los apicultores habían denunciado que la pandemia los había afectado en esta temporada de cosecha, la cual se inicia en octubre y concluye en mayo, debido a que la recolección bajó en 50 por ciento.

Mencionó además que venden mal su producto a causa de los coyotes; pero ahora el panorama se les complicó todavía más, porque no queda nada, todo está bajo el agua, lamentó la apicultora.

La mujer, integrante de la Alianza Maya por las Abejas (Kaab Nalo’on), comentó que en general la mayoría de los apicultores de la región resultaron severamente afectados.

Arrasadas, las colmenas

El agua arrasó con las colmenas y los accesos a los apiarios están inundados, detalló

Aunque no tiene datos exactos, indicó que se trata de una pérdida total tanto en cultivos como de abejas; una afectación de más de 3 mil colmenas, según sus cálculos.

En su caso, indicó que perdió más de 200 colmenas. Ni siquiera tengo abejas, no las pude encontrar, no hay, las arrastró el agua.

Asimismo, hay apicultores que no han podido entrar a sus apiarios para evaluar los daños y otros siguen incomunicados.

Un productor tarda alrededor de cinco años en obtener al menos 100 colmenas, pero en minutos se pierde todo, reflexionó Leydi Pech, quien también resultó damnificada y tuvo que salirse de su casa.

Por la devastación solicitó el apoyo de las autoridades para reactivar los apiarios, rescatar cultivos y productos, así como la ayuda urgente de Protección Civil o el Ejército para auxiliar a las familias afectadas y entregar víveres.

Aunado a esto, sigue el problema de la pandemia de coronavirus, y hay temor y preocupación de sufrir contagios masivos en los albergues temporales.