Lunes 1º de junio de 2020, p. 15
Si el cristianismo no se abre a lesbianas, gays, bisexuales, trans e intersexuales (LBGTI), dejará de interesar y multitudes se irán
de sus filas, afirmó fray Julián Cruzalta, fundador de Católicas por el Derecho a Decidir.
En el conversatorio digital Del clóset al orgullo, señaló que actualmente una parte de esta doctrina mantiene una cara patriarcal, colonial y excluyente, que persigue gente y lastima
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El problema es el fundamentalismo religioso
, el cual ha avanzado en los últimos años, por lo que demandó: Basta de esta mirada excluyente. El espíritu de Dios es libertad, ecuménico; es diversidad
.
En la videocharla organizada ayer por la Coalición Mexicana LGBTTTI+, expuso que los colectivos de la diversidad sexual tienen que trabajar mucho
la espiritualidad de la dignidad y la valentía, provocar en los otros estas posibilidades de tejer su vida de otra manera. La vida, el mundo espiritual son como tejer, hay nuevos nudos, colores, hilos
.
En su turno, Margarita Sánchez de León, de las Iglesias de la Comunidad Metropolitana y teóloga feminista, dijo que los grupos fundamentalistas han sufrido cambios y si bien antes no querían tener contacto con elementos de la modernidad, ahora han integrado increíblemente bien toda una estructura de la tecnología, de las redes digitales a través de las cuales hacen sus trabajos
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Además, aseguró, han agregado parte del discurso de los derechos humanos, lo cual hace un poco difícil articular una conversación porque quedan disfrazados tras esta máscara
.
Dijo que esta situación se genera en el contexto del avance de las garantías de las comunidades LGBTI y las de las mujeres.
Finalmente, pidió a los integrantes de la diversidad sexual recordar que la espiritualidad es un regalo que es vivido, no tiene que ser agenciado por la Iglesia
ni por ningún líder religioso.