La Paz. El comandante en jefe de las fuerzas armadas de Bolivia, general Sergio Orellana, amenazó ayer con desconocer la autoridad de la Asamblea Plurinacional (Congreso), dominada por el Movimiento al Socialismo (MAS) del derrocado ex presidente Evo Morales, si éste no aprueba en el plazo de una semana los ascensos anuales de generales de la institución militar.

Vamos a esperar como fuerzas armadas una semana para que la Asamblea se pronuncie. Caso contrario vamos a seguir el procedimiento reglamentado y legal que tenemos dentro de las fuerzas armadas, advirtió Orellana a reporteros tras presentar una comunicación al Senado.

El jefe militar, quien asumió el cargo tras el golpe de Estado de noviembre pasado, dijo que presentó al Senado la respuesta a las observaciones que esa instancia legislativa hizo a los ascensos a generales propuestos por la presidenta de facto, Jeanine Áñez, por iniciativa del alto mando.

Sentimos que la Asamblea Plurinacional no está tratando con consideración y respeto a las fuerzas armadas. Nosotros como institución exigimos el respeto que merecemos, sostuvo.

Orellana habló con la prensa en la Plaza Murillo, frente a los palacios de gobierno y Legislativo, adonde llegó acompañado por una decena de militares de alto rango.

Los ascensos, en trámite legislativo desde que Áñez los propuso en febrero pasado, han provocado roces entre el gobierno y el Congreso, que ha argumentado que tiene otras prioridades pendientes, en particular atender la crisis por la pandemia del Covid-19.

No quedó claro si la respuesta militar a los cuestionamientos del Senado estaba avalada por Áñez, quien es capitana general de las fuerzas armadas.