Washington. Las recomendaciones de los principales expertos en control de enfermedades de Estados Unidos sobre cómo reabrir con seguridad negocios e instituciones en medio de la pandemia, que incluyen una guía detallada y medidas más restrictivas que las presentadas por la Casa Blanca el mes pasado, fueron archivadas por funcionarios del gobierno de Donald Trump.

El documento –del cual Ap obtuvo una copia– de 63 páginas contiene los lineamientos de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), que también ofrecen recomendaciones para ayudar a las comunidades a decidir cuándo volver a cerrar instalaciones por rebrotes del Covid-19. Además, muestra cómo difieren los expertos de la institución y los que gestionan la respuesta a la pandemia en la Casa Blanca.

Tanto el documento de los CDC como el plan de la Casa Blanca recomiendan que las comunidades se reactiven gradualmente a medida que se reduzcan los contagios locales, pero una de las muchas diferencias es el consejo sobre cuándo se debería permitir la reanudación de los viajes no esenciales.

La guía de los CDC aconseja evitar todos los viajes no esenciales en las fases de reapertura hasta el último, cuando los casos estén en sus niveles más bajos. Y sólo considerar su reanudación luego de 42 días de descenso continuo en los contagios.

El plan de la Casa Blanca en cambio recomienda minimizar los viajes en la fase uno y señala que en la fase dos, tras 28 días consecutivos de descensos, los viajes no esenciales pueden reanudarse.

Plan sin base

El plan de reapertura de la Casa Blanca carece de orientaciones para realizar un seguimiento de la información más allá de los positivos. Pero el documento de los CDC ofrece ideas sobre cómo prever dónde podrían producirse los rebrotes, empleando información demográfica.

Los lineamientos de los CDC hacen hincapié en el peligro de que los estados y regiones avancen solos en estos tiempos de incertidumbre. La agencia aconseja dar enfoque nacional en lugar de un mosaico, porque las políticas de un estado podrían afectar a otro.

En este contexto, Paul Manafort, el ex jefe de la campaña presidencial que fue condenado a prisión como parte de la investigación especial sobre la intromisión de Rusia en las elecciones de Estados Unidos de 2016, fue excarcelado debido a preocupaciones sobre el contagio, informó su abogado.

Estados Unidos totaliza un millón 385 mil 639 casos y 83 mil 648 muertes por Covid-19, según la Universidad Johns Hopkins.

América Latina superó los 400 mil contagios y 23 mil muertos por Covid-19, según datos oficiales. Villa 31, un barrio marginal en el corazón de Buenos Aires, en el que viven hacinadas más de 40 mil personas, se convirtió en la zona donde más se han disparado los casos en Argentina, el cual pasó de uno a fines de abril a 511 confirmados ayer.

El presidente brasileño, Jair Bolsonaro dio negativo en los tres exámenes que se realizó de Covid-19 y contradijo a su ministro de Salud, Nelson Teich, quien el día anterior alertó del peligro de administrar cloroquina en momentos en que Brasil superó a Alemania en número de contagios, con 178 mil 214 casos y 12 mil 461 muertos.

Cuba, bajo las sanciones de Estados Unidos, apostó a que su sector biotecnológico impulsado por el fallecido líder revolucionario Fidel Castro, pueda dar a la isla ventaja en una carrera global para tratar el coronavirus.

El gobierno cubano promociona el interferón alfa 2b, un medicamento que produce un tipo de proteína conocida como interferón que fortalece el sistema inmune y ha sido exitoso para tratar el Covid-19 en la isla y en China. Por ahora más de 80 países se interesan en ese tratamiento, según La Habana.