Washington. Autoridades alemanas expresaron dudas sobre la explicación que dieron los dirigentes estadunidenses sobre que el nuevo coronavirus supuestamente proviene del Instituto de Virología de Wuhan, ciudad china donde se registró el primer caso del virus en diciembre, informó ayer la revista alemana Der Spiegel.

En un informe confidencial, el servicio federal de inteligencia germano (BND, por sus siglas en alemán) califica estas acusaciones como un intento del presidente estadunidense, Donald Trump, para desviar la atención de sus propios errores y dirigir la ira de sus compatriotas hacia China, detalla el semanario en su página web, que cita una nota dirigida a la ministra de Defensa, Annegret Kramp ­Karrenbauer.

Interrogado por la agencia noticiosa Afp, un vocero del Ministerio de Defensa no confirmó la existencia del informe.

Trump y su secretario de Estado, Mike Pompeo, han vinculado –sin mostrar evidencia pese a decir que la tienen– al virus con el laboratorio, aunque la comunidad científica internacional, hasta la misma inteligencia estadunidense, aseguran que el virus no fue creado de forma artificial y no saben dónde pudo haber sido elaborado.

Lea Gabrielle, coordinadora del Global Engagement Center, dependencia del Departamento de Estado, acusó a China y Rusia de incrementar su cooperación para divulgar un relato falso de la pandemia del nuevo coronavirus, y dijo que Pekín aplica cada vez más técnicas perfeccionadas por Moscú.

La dependencia informó en febrero que miles de cuentas ligadas a Rusia en las redes sociales propaga de manera coordinada teorías conspirativas según las cuales Estados Unidos está detrás del brote del virus Covid-19.

Trump, en entrevista con Fox News, reavivó sus críticas contra la Organización Mundial de la Salud y la acusó de ser una como una marioneta de China por avalar las reacciones del gigante asiático para controlar la propagación del virus.

Infectada en la Casa Blanca

Estados Unidos es la nación más afectada por la pandemia, al contabilizar ayer 77 mil 178 muertos, un millón 283 mil 502 casos y 198 mil 993 recuperados, según un conteo de la Universidad Johns Hopkins. El presidente previó en la Casa Blanca que esperan al menos 95 mil muertos en el país, aunque advirtió: Podemos estar hablando de algo más que eso.

En tanto, Washington bloqueó una votación en el Consejo de Seguridad de la ONU de una resolución que llamaba a un cese de las hostilidades en zonas en conflicto durante la pandemia, aparentemente debido a una mención implícita a la OMS.

Por otro lado, Katie Miller, vocera del vicepresidente Mike Pence, dio positivo del nuevo coronavirus, por lo que se convirtió en la segunda integrante del personal de la Casa Blanca en dar positivo de coronavirus en esta semana, informaron fuentes oficiales, mientras que Trump continuaba asistiendo a eventos oficiales sin cubrebocas.

La noticia aumentó los temores de que la Casa Blanca corra el riesgo de convertirse en un punto de infección de Covid-19, justo cuando el mandatario lidera los esfuerzos por reducir las medidas de confinamiento que han devastado a la economía más grande del mundo.

La funcionaria tiene acceso a reuniones de alto nivel y es esposa de Stephen Miller, uno de los principales asesores del presidente y arquitecto de la política antimigración.

Más temprano, un alto funcionario de la administración dijo que seis personas pudieron haber tenido contacto con Katie Miller. Este grupo, que debía viajar con Pence a Des Moines, Iowa, en el Air Force Two, debió abandonar el avión antes del despegue de la Base de Andrews, cerca de Was­hington, lo que retrasó la salida por casi una hora.

Ella es una joven maravillosa. Ha estado dando negativo por largo tiempo y hoy, de repente, ha dado positivo. No ha estado en contacto conmigo, ha permanecido un tiempo con el vicepresidente, manifestó Trump sobre el caso de Miller, y notificó que su vicepresidente se sometió a otra prueba, en que la que dio nuevamente negativo.

La última salida pública del jefe de la Casa Blanca fue para conmemorar el 75 aniversario de la victoria aliada sobre la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial. El presidente se reunió con ocho veteranos de guerra, quienes tienen entre 96 y 100 años, pero ninguno portó cubrebocas. El jueves, la Casa Blanca dijo que un miembro del ejército que trabaja como ayudante personal de Trump dio positivo a coronavirus. El magnate y Pence fueron sometidos a pruebas de detección y dieron negativo.

En tanto, el Departamento del Trabajo confirmó que millones de residentes en Estados Unidos fueron contados como empleados en abril pese a no tener trabajo, lo que sugiere que la tasa real de desempleo para este mes fue cercana a 20 por ciento, muy por encima del reporte oficial de 14.7 puntos.

Dos de tres personas en el país se oponen al reinicio de las actividades detenidas por el coronavirus, un tema que divide fuertemente a republicanos y demócratas, según una encuesta de ABC News/Ipsos.

AL: 17 mil muertes

En América Latina y el Caribe la pandemia ya dejó hasta ayer más de 319 mil casos confirmados y más de 17 mil muertos, según un conteo de la agencia Afp.

El gobernador de Sao Paulo, Joao Doria, anunció que debido a la disparada de casos de Covid-19 decidió prolongar la cuarentena hasta el 31 de mayo en el estado, ignorando las presiones del presidente Jair Bolsonaro.

En Argentina, el presidente Alberto Fernández anunció que mantendrá el aislamiento social obligatorio en la capitalina Buenos Aires y en su área metropolitana, mientras que flexibilizará las restricciones en el resto del país.